La vuelta al trabajo del Celta tras el valioso empate obtenido el domingo ante el líder en el Bernabéu registró ayer un contratiempo para Óscar García, que podría quedarse sin el concurso de Denis Suárez para la cita frente al Leganés. Además, el técnico está pendiente del alcance del esguince de rodilla sufrido por Kevin Vázquez ante el Real Madrid. Ambos futbolistas son duda para el compromiso del sábado en Balaídos (13 horas), a la espera de conocer los resultados de las pruebas médicas que se les tenía previsto realizar a ambos.
El salcedense volvió a sufrir ayer un esguince en el mismo tobillo derecho que le causó problemas en dos periodos diferentes de la presente temporada y que incluso le obligaron a perderse un par de partidos entre diciembre y enero. Cuando se le presentaba la oportunidad de pelear de nuevo por la titularidad, Denis Suárez vuelve a resentirse de una lesión que este curso se está repitiendo entre los célticos debido al mal estado del césped del campo de entrenamiento de A Madroa.
Este contratiempo le llega a Denis Suárez cuando había recuperado la sonrisa después de acaparar la atención y los elogios por la extraordinaria asistencia de gol que se inventó para que su compañero Santi Mina anotase el gol del empate ante el Real Madrid. Quien se convirtió el verano pasado en Vigo en el fichaje estelar de la Operación Retorno intenta ganarse de nuevo la confianza del entrenador y recuperar la titularidad perdida desde finales de noviembre. Su estelar irrupción en los últimos minutos del partido del Bernabéu le situaban de nuevo entre los candidatos a formar parte del once que el sábado se medirá a un rival directo por la permanencia.
Ahora mismo, Denis es duda para la vigésimo quinta jornada de LaLiga, a la espera del resultado de las pruebas médicas que se le realicen en las próximas horas. Desde el club apuntaban ayer que a lo largo de la jornada de hoy se podrá conocer el alcance de la lesión del salcedense. En un principio se ha comunicado que el jugador sufre un esguince en el tobillo derecho que obligó a vendarle la zona afectada y a someterle a tratamiento médico. El pronóstico, según los médicos, dependerá de cómo evolucione el tobillo tras el contratiempo que ayer quebró en parte el buen ambiente con el que el equipo regresó al trabajo después de sumar cuatro puntos en las dos últimas jornadas ante rivales como el Sevilla y el Real Madrid.
Los problemas del centrocampista céltico en esa articulación se remontan a finales de septiembre, desde la visita del Espanyol a Balaídos. El mal estado del campo de entrenamiento de la ciudad deportiva de A Madroa, debido a las intensas lluvias de otoño e invierno, pasó factura a varios jugadores. A partir de ahí, Denis Suárez fue perdiendo presencia en el once titular, al que no ha vuelto desde finales de noviembre. De hecho, causó baja contra el Mallorca, se recuperó para la cita del Levante (último partido de 2019) y volvió a recaer ante Osasuna, en la cita que abría el nuevo año.
El domingo aprovechó los veinte minutos que le concedió Óscar García para inventarse un maravilloso pase al hueco entre la defensa madridista para que Mina encontrase espacio libre para armar la pierna y superar a Courtois. Un gol extraordinario. Ayer, durante el entrenamiento, el salcedense volvía a resentirse del tobillo derecho.
