Desde lo alto del graderío de Mestalla sonarán esta noche las gargantas de más de 350 celtistas. Decenas de aficionados se han puesto en ruta a primera hora de este sábado para llegar a tiempo a la cita del Celta en su visita al Valencia (21.00 horas). Un largo camino que ha empezado esta madrugada en Balaídos y que terminará mañana con otro interminable viaje de regreso a Vigo. 950 kilómetros de ida y otros tantos de vuelta. Y entre tal nutrido grupo de celtistas viaja María Juncal, la madre de Iago Aspas.

La moañesa, como ya ha hecho en otras ocasiones, se ha sentado en primera fila de uno de los autobuses que a las seis de la mañana han salido de Vigo. No es la primera vez que María Jucal se une a las expediciones celestes por carretera. El curso pasado también se desplazó en autobús a los campos del Athletic Club y del Leganés. En esta ocasión lo ha hecho, además, acompañada de su pareja, el padre de Iago Aspas, Urbelino Aspas. Junto a ellos y a todos los aficionados que han viajado desde Vigo estarán una treintena de hinchas de la peña celeste de Barcelona Blau Cel y varios representantes de la Peña Celtista Alcoyana

Por su parte. veinte jugadores del Celta han volado a primeras horas de esta mañana desde Peinador hasta Manises. En Vigo se quedan los lesionados David Juncà e Iván Villar, además de Jorge Sáenz, Pape Cheikh y Juan Hernández, por decisión técnica. La principal novedad de la lista es Smolov, a quien Óscar García ha incluido en la expedición para que vaya conociendo la dinámica del grupo, pues se subirá al avión sin haber entrenado con sus nuevos compañeros.