Javier Aguirre logró su primer triunfo tras cuatro partidos como técnico pepinero. Lógicamente, se mostraba feliz por un resultado que saca al Leganés del puesto de colista y lo sitúa a solo cinco puntos de la permanencia: "tranquilo nunca estás con ningún marcador. Se ha complicado porque quizá nos confiamos un poquito, dejamos de hacer lo que estábamos haciendo bien y luego nos entró el miedo en el cuerpo. Ya no queríamos jugar, queríamos balones en largo, esperando que acabara el partido cuanto antes. Pero me quedo con todo lo que hicimos bien durante muchos minutos y, lógicamente, con la conquista de tres puntos muy importantes".

Sobre esos últimos minutos ante el Celta dijo que "cagado, estaba cagado. Un día me levantó el Athletic tres goles y nos metió cuatro, me estaba acordando de eso. El Celta estaba presionando bien, planteó bien el partido con diez jugadores, y el Leganés no encontraba respuesta. Creo que eso hay que valorárselo al Celta, que como nosotros se juega la vida cada domingo. Al final, ya con los tres cambios hechos, apelas al orgullo de los jugadores". Sobre la situación del Celta admitió su sorpresa: "Tiene muy buenos peloteros y un gran técnico. Me fijaba en el equipo que entrenaba en Francia y jugaba muy bien. Esto es LaLiga y cada semana es un reto. Yo pensaba que nos iban a complicar la vida y así fue, hubo ratos que ni la olimos".