El Celta se llevó un considerable susto en el entrenamiento de esta tarde debido a la lesión sufrida por Rubén Blanco. El portero de Mos sufrió una torcedura en una de sus rodillas durante la sesión de trabajo. Sus gestos de dolor hicieron temer por una lesión de la máxima gravedad, aunque finalmente la primera exploración tranquilizó al entorno.

Rubén sufrió un esguince de rodilla y su periodo de baja se quedará previsiblemente en unas pocas semanas. De todos modos, el portero será sometido a nuevas pruebas en las próximas horas para descartar cualquier otro daño, aunque los médicos dieron por descartada una lesión de mayor gravedad.

De todos modos, el futbolista será baja en el encuentro de esta domingo en Villarreal y Oscar García deberá decidir entre Sergio Alvarez e Iván Villar para ocupar la portería ante los castellonenses.