El Celta ha facilitado el plan de trabajo para la semana en curso, en la que el conjunto que dirige Óscar García Junyent visita el Estadio de la Cerámica con el objetivo de acabar con una mala racha como visitante que se prolonga desde hace casi un año. Tras dirigir ayer una primera sesión abierta al público todavía sin internacionales, el técnico celeste ha programado otras cinco sesiones de trabajo con un diseño poco habitual. El plantel celebrará mañana doble turno de entrenamiento en A Madroa, se entrenará el miércoles en sesión matinal y retomará el trabajo el viernes por la mañana en la ciudad deportiva. El sábado, víspera del choque contra el Villarreal, los celestes celebrarán un último entrenamiento en Balaídos. Todas las sesiones se celebrarán a puerta cerrada.