Genís García Junyent (Sabadell, 1975) es el mediano de la saga y el único que no alcanzó el fútbol de élite, aunque tras dejar el filial militó durante algunos años en Segunda División B con el equipo de su ciudad natal, del que los tres hermanos son socios, y con cuya secretaría colaboró algunos años después de colgar las botas.
Aunque su equipo del alma es el Centre d'Esports Sabadell -su padre hizo socios y llevaba a los partidos a los tres hermanos desde muy pequeños-, la mayor parte de su carrera transcurrió en las categorías inferiores del Barcelona, con cuyo filial llegó a jugar en Segunda División.
Genís fue el único de los tres hermanos que no llegó a alcanzar la primera plantilla azulgrana. Sus apariciones con el primer equipo del Barça -debutó en un amistoso contra el Blackburn Rovers- se limitaron a un unos pocos partidos no oficiales y al emotivo encuentro de la Copa de Catalunya frente al CE Europa, que se recordará por ser la primera y única vez que compartió la camiseta azulgrana con sus dos hermanos sobre el terreno de juego.
Tras dejar a los 22 años el Barça, Genís García fichó por el Sabadell, cuya camiseta defendió durante ocho años compaginando el fútbol con el ejercicio de la docencia en el Colegio Bertrán, la misma escuela en la que los tres hermanos cursaron sus primeros estudios y donde enseña desde hace ya casi cinco lustros. "Cuando vine al Sabadell, en Segunda B, ya me enfoqué a otra vertiente. Había estudiado magisterio y me introduje en el mundo de la docencia. Desde hace 25 años doy clase a niños de entre 8 y 12 años", indica. Su relación con el fútbol es ahora simplemente pasional. "Durante algún tiempo estuve vinculado a la secretaría técnica del Sabadell, pero ahora solo participo en el campus de verano que hacemos los tres hermanos en nuestra ciudad", apunta.
