Las secuelas del partido del Benito Villamarín han trascendido a la derrota y complican la ya delicada situación de Fran Escribá, que dispone mañana ante el Getafe de una última bala para evitar el despido. El técnico celeste recibió ayer la mala noticia de que no va a poder contar al menos para los dos próximos partidos con Santi Mina y Rafinha Alcántara debido a las lesiones que sufrieron durante el último compromiso liguero frente al Betis.

Las pruebas médicas practicadas el pasado jueves al delantero vigués han confirmado la existencia de una rotura muscular de primer grado en el músculo aductor izquierdo que lo va a mantener unas tres semanas alejado de los terrenos de juego. Si no se produce ningún contratiempo, el futbolista canterano se perderá los próximos compromisos ligueros contra el Getafe y Barcelona y estaría en condiciones de reaparecer contra el Villarreal en la visita al Estadio de la Cerámica programada para el 24 de noviembre, a la vuelta del parón de selecciones.

El periodo de recuperación de Rafinha es, por ahora, indeterminado. Los servicios médicos del Celta informaron de que el brasileño presenta un edema por contusión en la zona distal del fémur que obligará a limitar impactos durante diez días. Posteriormente, los facultativos irán evaluando la evolución del problema hasta que el jugador esté en condiciones de recibir el alta médica. Con estas premisas, Rafinha se perderá, en el mejor de los supuestos, el inminente duelo contra los azulones y la visita al Camp Nou ante su exequipo.

No es la primera vez que las lesiones golpean a Santi Mina y a Rafinha desde su regreso al Celta. El artillero olívico ya se perdió el duelo inicial de la Liga y fue suplente en los dos siguientes por culpa de un esguince de tobillo sufrido durante un amistoso de pretemporada contra el Tenerife.

Rafinha, mientras, se ha perdido ya dos encuentros desde que se incorporó a la disciplina celeste en el último día del mercado veraniego y estará fuera de juego al menos otros dos. El exazulgrana estuvo dos semanas de baja por una rotura en el sóleo que le hizo perderse el partido de la cuarta jornada de Liga contra el Granada y tampoco pudo estar en el último compromiso liguero en Balaídos contra la Real Sociedad debido a una contractura muscular y a una posterior gastroenteritis.

Las bajas de Rafinha y Santi Mina, indiscutibles hasta la fecha para Fran Escribá, obligan al técnico a modificar este domingo ante el Getafe el once desplegado hace unos días en el Benito Villamarín. Brais Méndez y el uruguayo Gabriel Fernández, el Toro, se perfilan como sus sustitutos ante los azulones.

La cara amable del parte de enfermería la protagonizó ayer Juan Hernández, que ya se ejercita con plena normalidad con el grupo tras permanecer más de un año en blanco por culpa de una grave lesión de rodilla. Los servicios médicos prevén darle el alta la próxima semana.

Buenas noticias también en torno al estado físico de Hugo Mallo tras el golpe en la cara que el marinense recibió el miércoles en el Benito Villamarín. El capitán céltico llega al partido contra el Getafe en buenas condiciones físicas.