La cuerda que une a Fran Escribá al banquillo del Celta no deja de deshilacharse. Ya solo unas pocas hebras le mantienen agarrado al cargo después de sumar una nueva derrota en Balaídos ante la Real Sociedad en un partido marcado por la exagerada precaución de ambos equipos.

El Celta no carbura. No genera, ni marca, ni gana, ni nada de nada. La Real Sociedad volvió a confirmar ayer la exigua evolución del conjunto de Fran Escribá, que perpetúa su devastadora carencia de gol sin que se vislumbre remedio a las pobres prestaciones ofrecidas por un grupo del que se esperaban grandes cosas y que decepciona jornada tras jornada.

El técnico céltico es consciente de que su cargo pende ahora mismo de un hilo, pero se aferra al trabajo y a la confianza del grupo en su liderazgo para mirar adelante en busca de una reacción que no acaba de llegar, pero que él sigue viendo factible.

Por eso, hemos decidido preguntarle a la afición del Celta lo siguiente:

  • ¿Debe el Celta destituir a Fran Escribá?