"Aún falta Thiago", se ha oído ya en el delirio provocado por la "Operación Retorno". Como humorada sin más, pero porque a Thiago Alcántara, aunque nunca perteneció la cantera del Celta sino al Ureca durante su infancia en Vigo (Rafinha también, pero llegó a disputar algún torneo vestido de celeste), el celtismo lo percibe como a uno de los suyos. Y Thiago lo confirma en una entrevista con Televisión Española, en la que se proclama "celtista" cuando se alegra por el fichaje de su hermano. Y aunque el Celta jamás creyó, hasta las últimas jornadas del mercado, que Rafinha podría estar a tiro, Thiago asegura que su hermano pequeño manejó esa opción entre sus preferidas desde el inicio del trabajo veraniego.

Thiago atiende al ente público en la concentración de la selección española. Ha vuelto a la convocatoria, la primera con Robert Moreno como seleccionador absoluto, después de algunas ausencias. Y le preguntan por el fichaje de Rafinha pocas horas después de que se haya concretado. Es entonces cuando afirma: "Como celtista estoy muy contento, primero de todo, externamente, de tener a un jugador como Rafa en mi equipo. Sobre todo, más importante y a nivel personal, el trabajo que le ha llevado durante la pretemporada a estar bien después de la lesión de rodilla, hacer el inicio de Liga, que ha sido fantástico, poder acabar en un equipo como el Celta ha sido el sueño suyo desde el principio la pretemporada".