El Concello de Vigo, propietario del estadio de Balaídos, garantizó este sábado que la grada de Rio estará "plenamente operativa" para el estreno liguero del Celta contra el Real Madrid, previsto para el próximo 17 de agosto.

En un comunicado de prensa, el equipo de gobierno de la ciudad señala que, a diferencia de lo que anunció ayer la entidad presidida por Carlos Mouriño, esa grada "no se cierra ahora sino que lleva cerrada desde que finalizó la pasada temporada para continuar con las obras que quedaban pendientes".

Además, el Concello acusa al Celta de "ocultar" que es "conocedor" de esta situación "desde el primer momento", y lamenta que "nunca" trasladara "objeción alguna" por el cierre de dicho graderío.

En este sentido, el ayuntamiento explica que, además de ajustar la instalación de los asientos, se está terminando la instalación de un elevador para personas con movilidad reducida, así como acometiendo trabajos de acondicionamiento del Instituto Municipal de Deportes, situado bajo la grada en cuestión.

"La máxima preocupación del Concello es la seguridad, y este extremo ya se le trasladó al Celta con anterioridad, así como el cronograma de las obras, aunque el club omita esta circunstancia en su comunicación pública", denuncia el equipo de gobierno.

No obstante, desde el ayuntamiento recuerdan que en el pasado el Memorial Quinocho ya se disputó con la grada de Rio "cerrada", y que el histórico de afluencia" de público evidencia que el torneo se puede disputar "con absoluta normalidad".