El fichaje de Nolito, que el Celta pretende cocer a fuego lento aprovechando la elevada ficha del sanluqueño y la necesidad del Sevilla de aligerar carga salarial, parece complicarse a medida que avanzan las semanas. Mientras el futbolista se reivindica sobre el césped a golpe de goles -suma ya tres en otros tantos amistosos de pretemporada-, el conjunto hispalense no cede en su pretensión de obtener un rendimiento económico por el jugador, que afronta su último año de contrato en Nervión.

La postura del Sevilla es inflexible, según ha declarado Juan Ramón Rodríguez Verdejo, Monchi, director deportivo sevillista, durante la reciente presentación del serbio Nemanja Gudelj. "La situación de todos los que creemos que tienen que buscar un camino distinto está muy clara. Hace 45 días que todo está comunicado. No vamos a infravalorar nuestro patrimonio ni aceptar una oferta que no consideremos oportuna. Mientras tanto siguen trabajando" , sentenció el alto responsable del club nervionense, que ha tasado a Nolito en 4 millones de euros.

Esta cifra es absolutamente inabordable para el Celta, que cuenta con la baza de que el futbolista desea volver a Balaídos, pero no está dispuesto a afrontar un traspaso para recuperarlo. En Príncipe, de hecho, ya manejan alternativas al sanluqueño, con cierto malestar de los pesos pesados del vestuario celeste, que quieren a Nolito en el equipo la próxima temporada y esperaban que el club hiciese un esfuerzo para ficharlo.

La situación permanece de momento estancada, aunque el verano es muy largo y el Celta, que ya tiene la configuración de la plantilla encarrilada, puede permitirse esperar acontecimientos mientras estudia el mercado.