"Llegó la hora de despedirme. Estos días han estado cargados de emociones, imágenes y recuerdos que me vienen a la mente. No olvidaré aquel día que recibí la llamada para ser parte de esta gran familia que me acogió como uno más de ustedes".

"Gracias por estos 7 años vividos donde hemos pasado momentos buenos y no tan buenos que me llevaré para siempre en mi corazón; estoy feliz de haber sido parte de este club tan especial para mí y mi familia y triste porque me toca marchar".

"Agradezco a mis compañeros y cuerpos técnicos que han pasado y los que han estado hasta el final de esta hermosa etapa".

"Quiero dar la gracias a esas personas que trabajan y que nos ayudan día a día: cuerpo médico, utilero, lavandería, delegados, administración, dirigentes, prensa, trabajadores de A Madroa y Balaídos".

"Tampoco puedo dejar de nombrar a esta maravillosa ciudad que nos ha hecho feliz a mí y a mi familia".

"Desde ahora quito la camiseta de jugador y me pongo la de un aficionado más?"

"Esto no es un adiós, sino un hasta pronto".

"¡Hala Celta!"