Diego Alende abandona el Celta. El club vigués comunicó ayer al capitán del filial que va a hacer uso de la opción unilateral que dispone para rescindir su contrato al considerar que el zaguero santiagués no tiene encaje en su primera plantilla. El Celta debía decidir estos días si despedía a Alende (la rescisión del vínculo laboral contempla una indemnización previamente pactada) o prorrogaba por dos temporadas su contrato con ficha en el primer equipo con una importante mejora salarial.

El club ofreció a Diego Alende la posibilidad de seguir una temporada más en el filial, pero el futbolistas rechazó la alternativa al considerar que su ciclo en el Celta B había concluido. El jugador busca ya equipo y cuenta con alguna propuesta de Segunda División, en el extranjero y de varios equipos de Primera División interesados en que juegue en su filial pero se entrene en su primer equipo.

La feroz competencia que se presume en la eje de la zaga céltica la próxima campaña -Fran Escribá cuenta con Néstor Araújo y David Costas y espera además dos fichajes- y la convicción de la dirección deportiva de que Alende no está maduro para la Primera División parecen estar en el origen de la decisión del Celta.

En los últimos días se había especulado con la posibilidad de que el equipo celeste prorrogase el contrato del zaguero compostelano con la idea de cederlo a un conjunto de Segunda División A en el que pudiese crecer futbolísticamente pero finalmente el club no ha contemplado esta alternativa.

Diego Alende, de 21 años, abandona el Celta después de más de una década de militancia en las categorías inferiores del club y convertirse en los últimos años en uno de los jugadores de referencia del Celta B, donde la pasada temporada sucedió a Kevin Vázquez en la capitanía. El zaguero de Santiago de Compostela se va tras haber disputado 111 encuentros con el filial en Segunda División B (más 6 de promoción de ascenso y 2 de promoción de permanencia) y el buen sabor de haber debutado en el primer equipo de la mano de Eduardo Berizzo, con el que jugó dos encuentros de Copa del Rey (frente al Almería y el Cádiz) y se estrenó en Primera División. Fue un único partido, en el Benito Villamarín contra el Betis. El santiagués entró en la segunda parte en sustitución de Theo Bongonda y pudo disfrutar de sus primeros 39 minutos en la máxima categoría.

Por otra parte, hoy concluye el plazo en el que el Celta puede ejercer su opción para rescindir el contrato de Sergio Álvarez. Según los términos pactados en la renovación del guardameta catoirense, el Celta tiene la posibilidad de despedir a Sergio en los 20 días posteriores a la conclusión de la temporada. Ese plazo se cumple hoy y Sergio sigue sin noticias del Celta, con lo que si en las próximas horas no recibe una comunicación formal de despido su vínculo contractual con el club celeste permanecerá vigente hasta junio del próximo año.

Por lo que respecta a Gustavo Cabral, cuya continuidad parece cada vez más improbable, el zaguero ha viajado a Argentino sin haber recibido ninguna propuesta de renovación del Celta, aunque el jugador esperaba tener noticias del club antes del 30 de junio, fecha en la que expira su contrato.