El Celta puso ayer la primera piedra de su nuevo equipo con la renovación de Fran Escribá, el técnico que ha dirigido al equipo en los últimos tres meses y que ahora tendrá la oportunidad de iniciar su propio proyecto al frente del banquillo de Balaídos. El preparador valenciano se ha comprometido con el club celeste por dos temporadas, aunque el segundo año está condicionado al cumplimiento de una serie de objetivos que no se han especificado.

La continuidad de Escribá se formalizó en la tarde de ayer en A Sede con el acto protocolario de la firma del nuevo contrato. Además del entrenador y el presidente Carlos Mouriño, a la rúbrica asistieron Felipe Miñambres, el director deportivo, y los miembros del cuerpo técnico de Escribá: David Generelo (segundo entrenador), Miguel Villagrasa (preparador físico) y David Martínez (analista). Con ellos continúan el entrenador de porteros Nando Villa, así como Mario Bermejo y Borja Oubiña, que compaginarán su labor en el primer equipo con sus responsabilidades en la secretaría técnica del club. Al grupo se incorpora además el hasta ahora responsable, Carlos Hugo García Bayón, que quien también será el responsable de la formación de los entrenadores y metodología de las categorías inferiores del club.

El acuerdo ha sido muy rápido. Un par de reuniones han bastado para sellar una negociación que las dos partes han afrontado desde un primer momento con muy buena disposición de entendimiento y se ha concretado en menos de 48 horas. Escribá era la primera y única opción del Celta -no se contempló otra posibilidad ni se establecieron contactos con otros técnicos- y el entrenador valenciano estaba contento con el vestuario y el club y deseaba iniciar un proyecto en el que pudiese dejar su propia impronta.

"Ya en lo que quedaba de temporada estuve muy a gusto y una vez que se consiguió el objetivo y las dos partidos contentas ha sido fácil. Estoy muy contento de continuar aquí", dijo el técnico tras la firma a Celta Media, el canal del club.

Con la contratación de Fran Escribá el Celta cambia de perfil técnico de su banquillo. Del entrenador autor, que se define por el trazo estilístico, se ha pasado al entrenador de oficio, que cimienta su credo deportivo en el rigor táctico, el equilibrio y el conocimiento de la competición.

Durante los últimos años el Celta ha apostado por entrenadores que propugnaban un peculiar estilo futbolístico con el que el club y la afición se sentían plenamente identificados. Luis Enrique y sobre todo Eduardo Berizzo hicieron del Celta un conjunto de autor, un equipo de vocación abiertamente ofensiva construido sobre una propuesta de juego atractiva y fácilmente reconocible que desapareció con sus sucesores. Juan Carlos Unzué perdió la oportunidad de crecer a partir del ambicioso legado de Berizzo con una temporada claramente por debajo de las expectativas que no convenció al club para renovar su contrato. Antonio Mohamed y Miguel Cardoso, las siguientes apuestas de la dirección deportiva, sin experiencia en la LaLiga, fracasaron de plano en su intento de reactivar al equipo, convirtiendo al Celta en un conjunto deprimido y absolutamente dependiente de Iago Aspas que dejaron al pie de los caballos.

La llegada de Escribá (con Aspas ya recuperado) sacó al equipo del fango. Sin llegar a resolver muchos de los problemas que había heredado, el valenciano tiró de experiencia para poner orden y proporcionó la confianza y el oficio que necesitaba para salvar los muebles. Y esto es precisamente lo que ha valorado el club para entregarle su nuevo proyecto, en el que su opinión será tenida muy en cuenta. La nueva etapa de Escribá comenzó ayer mismo, tras estampar su firma en el contrato que lo vinculará al cuadro celeste al menos hasta junio del próximo año.

El técnico, que no volverá a ser presentado, estará todavía algunos días más en la ciudad para sentar con la dirección deportiva las bases del nuevo equipo.

Los primeros pasos antes de irse de vacaciones será decidir las salidas y cesiones, planificar con la dirección deportiva las nuevas contrataciones y programar la pretemporada. De momento, aunque no hay confirmación oficial, el equipo debe volver al trabajo el próximo 8 de julio.