Iago Aspas será jugador del Celta hasta 2023, el año en el que club cumple 100 años de existencia. El conjunto vigués acaba de anunciar la renovación del delantero de Moaña tras lograr un acuerdo de ampliación de un año del contrato vigente y su correspondiente mejora económica. El ariete, fundamental en el camino de la salvación, "continuará luciendo hasta 2023 el escudo que tantas veces ha señalado con orgullo y pasión en los estadios de todo el país", explica el equipo en una nota de prensa.
La renovación de Iago Aspas era una de las noticias más esperadas por la afición y llega en vísperas del partido ante el Girona de Eusebio Sacristán, el técnico que inició el cambio de modelo en el equipo vigués apostando por el talento de la casa y que el sábado visita Balaídos en un partido en el que ambos equipos se enfrentan en situación de gran necesidad.
El delantero de Moaña ya había hablado en las últimas semanas de las negociaciones con el Celta y su hermano, que ejerce de representante, expresaba el deseo de la estrella celeste de continuar en las filas del equipo vigués. "En tres minutos puede cerrarse el acuerdo para que el mejor jugador de la historia del Celta amplíe y mejore el actual contrato", apuntaba entonces Jonathan Aspas. "Iago podría dejarse ir y marcharse a otro club [al final de temporada] cobrando tres o cuatro veces más, pero él quiere seguir en Vigo por amor al Celta", decía.
En otra entrevista -la semana que el fútbol vio llorar al jugador en el banquillo del Celta en Balaídos-, Iago Aspas revelaba que las negociaciones de la renovación se habían parado mientras se recuperaba de la lesión muscular que sufría en el Camp Nou y que lo alejó varios meses de los terrenos de juego. "Quedó pendiente por la lesión y las circunstancias del equipo", explicaba el genio de Moaña.
