La plantilla del Celta regresa hoy a los entrenamientos después de haber disfrutado de descanso en la jornada dominical. Fran Escribá ha fijado para las 17:30 horas el comienzo de la sesión de trabajo en las instalaciones de A Madroa, que será abierta al público. Los célticos comenzarán a preparar el partido contra el Girona, cita en la que Escribá volverá a contar con Iago Aspas después de que el moañés cumpliese el partido de sanción por tarjetas amarillas. En la enfermería continúan Brais Méndez y David Juncà. El centrocampista se recupera de la rotura fibrilar de grado uno en el bíceps femoral izquierdo que sufrió durante el partido ante el Huesca. Al mosense no se le espera en el equipo para el próximo fin de semana. Juncà, que ha visto frenado el proceso de recuperación de la rotura fibrilar de grado uno en el aductor medio de la pierna derecha, continúa con actividad limitada aunque podría incorporarse esta semana a los entrenamientos con el grupo.

Escribá ha previsto cinco entrenamientos para preparar el duelo del sábado ante el Girona (Balaídos, 13 horas). De martes a jueves, el conjunto celeste trabajará en A Madroa a puerta cerrada a partir de las 10:30 horas. El plan se completará el viernes con una sesión matinal en el estadio de Balaídos, también sin acceso público.

Los célticos afrontan una nueva final, en la que volverán a contar con el apoyo incondicional de una afición que en unas horas agotó las invitaciones y las entradas que el club puso a su disposición en las taquillas, incluidas las de la zona reservada a los seguidores del equipo rival. Se espera, pues, que el coliseo vigués presente en la matinal del sábado un ambiente similar al de las visitas del Villarreal y de la Real Sociedad.

Entonces, el conjunto vigués partía de los puestos de descenso y tanto el club como el colectivo de peñas movilizó a la afición para prestarle ayuda y ánimos al equipo de Escribá para conquistar los tres puntos. Tanto en estas dos citas como en la de Huesca, Iago Aspas fue el principal protagonista. El moañés regresaba al equipo tras una baja de casi tres meses por lesión. Durante su ausencia, el equipo vigués solo sumó 4 puntos en 11 partidos. En los tres siguientes, Aspas contribuyó con 5 goles y 2 asistencias a que los célticos obtuviesen 7 puntos de 9 posibles. Aspas causó baja el sábado en el Metropolitano, donde el Celta cayó por 2-0 tras otra mediocre actuación. Ante el Girona, otro rival por la permanencia, los de Escribá necesitan contar con la mejor versión de Aspas para conseguir la victoria y alejarse todavía más de la zona de descenso.