El Celta regresó al trabajo esta mañana con una sesión de entrenamiento a puerta abierta en A Madroa. Con dos semanas por delante para preparar la visita del Villarreal a Balaídos (sábado 30 de marzo, 18:30 horas), la atención del equipo vigués se centra en los lesionados Iago Aspas y David Juncà. El moañés espera reaparecer en la vigésimo novena jornada de LaLiga tras recaer de una lesión en el gemelo interno. Esta mañana ya saltó al verde a hacer ejercicios específicos en solitario.

El doctor García Cota se mostraba optimista el sábado desde el Bernabéu con respecto al delantero de Moaña: "Aspas está yendo bien y de seguir así, y sin que suceda nada extraño, estará en el siguiente partido" . El jefe de los servicios médicos del Celta apuntaba tras el partido contra el Real Madrid que se prepara un partido amistoso aprovechando este parón en LaLiga por los compromisos de las selecciones para que Aspas se pruebe. "La idea es que haga una minipretemporada para ponerlo a tono".

Juncà, por su parte, se lesionó el aductor derecho en el Bernabéu, por lo que estará de baja unas tres semanas. Estos días se le realizarán pruebas médicas.