Al Celta de Vigo le quedan doce finales para esquivar el descenso y el club de Carlos Mouriño le ha encargado a Fran Escribá, nuevo entrenador del equipo, la tarea de solucionar la situación y salvar una campaña marcada por la inestabilidad deportiva que ha llevado a los celestes a situarse a dos puntos de los puestos de descenso.

Fran Escribá es el tercer entrenador que se sienta en el banquillo del Celta

en una misma temporada. Deberá corregir la trayectoria negativa que se originó con Antonio Mohamed y que se acentuó todavía más con la llegada de Miguel Cardoso, cuya relación con el equipo vigués se terminó después de 'pinchar' en Ipurua y sumar solamente 11 de los 42 puntos que se han disputado con él en el asiento de entrenador.

La apuesta del Celta por Fran Escribá obedece a la urgencia, como la de Abel Resino en su día; sin ninguna pretensión estílística por parte de la directiva, con lo matemático como único objetivo. Una situación que pone a la afición en la tesitura de buscar la razón por la que se ha llegado a este punto: ¿quién es el culpable?

  • ¿Quién es el responsable de la situación del Celta?