El Celta afronta cuatro jornadas de LaLiga antes de que a mediados de marzo se produzca un nuevo paréntesis en el campeonato debido a los compromisos de las selecciones nacionales. Hasta ese parón, en el que Miguel Cardoso seguirá sin poder contar con el lesionado Iago Aspas, los célticos tendrán compromisos en las alturas y solamente en una sola ocasión jugarán ante su afición.

Arranca este ciclo del conjunto celeste con dos desplazamientos seguidos a tierras vascas. El sábado que viene se enfrentan al Alavés (Mendizorroza, 18:30 horas) y el domingo 3 de marzo se miden al Eibar (Ipurua, 12 horas). Los célticos jugarán el domingo 10 de marzo en casa contra el Betis (12 horas) y cerrarán esta etapa en el Santiago Bernábeu el fin de semana seguiente. LaLiga no ha dado a conocer los horarios de esta vigésimo octava jornada del campeonato.

Doce puntos se juega el conjunto celeste antes de afrontar el último parón de la temporada y que dará paso a la etapa definitiva, en la que los de Cardoso tendrán que pelear por eludir la zona de descenso en la que ahora se encuentran a un punto de distancia.

En la recta final de LaLiga, el Celta se enfrentará a siete de los once equipos que ocupan las últimas posiciones de la tabla clasificatoria y que ahora mismo son rivales directos para conseguir la permanencia: Villarreal, Huesca, Girona, Espanyol, Leganés, Athletic Club de Bilbao y Rayo Vallecano.

Ante estos siete rivales, los celestes sumaron un total de 7 puntos, tras ganar en Villarreal, al Huesca en Balaídos y empatar con el Espanyol el partido con el que se abrió LaLiga en el estadio vigués. Entonces, los célticos se marcaban como objetivo alcanzar una plaza europea.