Miguel Cardoso recibió ayer la buena noticia por la que el Celta llevaba semanas esperando: Iago Aspas está listo para reaparecer después de mes y medio lesionado. El goleador celeste recibió ayer el alta médica tras cuatro jornadas entrenándose sin molestias con el grupo y podrá vestirse de corto mañana en el Coliséum Alfonso Pérez, donde el equipo vigués busca frente al Getafe un segundo triunfo consecutivo que le permita tomar distancia con la zona de descenso.

La cuestión ahora es si, después de más de mes y medio lesionado y perderse cinco partidos (Athletic, Rayo Vallecano, Valencia, Valladolid y Sevilla, además de casi todo el segundo tiempo del Camp Nou), el preparador portugués recurrirá a Aspas como opción de partida (como parece lo más probable) o utilizará a su estrella con el partido ya en marcha. Dependerá, esencialmente, del propio futbolista, aunque el moañés es de los que prefiere apurar en el campo hasta el último minuto.

El regreso de Aspas, quien pese llevar mes y medio inactivo continúa liderando el gol nacional en LaLiga, supone todo un plus para el Celta, que solo ha ganado esta temporada un encuentro -precisamente el último- sin su estrella sobre el campo y permitirá al mismo tiempo incrementar el potencial goleador del equipo frente a uno de los rivales más intensos y que mejor defienden del campeonato.

Lo cierto es que sin el concurso de Iago Aspas el Celta ha generado muy poco caudal ofensivo con la pelota jugada y ha tenido que recurrir a las acciones de estrategia para anotar cinco de los últimos seis goles que ha marcado desde el parón navideño. El único gol en jugada de los últimos siete encuentros lo anotó Pione Sisto contra el Valladolid en el último desplazamiento del equipo, que los celestes acabaron perdiendo después de haberse adelantado en el marcador (2-1).

El regreso de Aspas modificará muy probablemente el once del Celta en el Coliséum, que inevitablemente ya iba a cambiar con respecto al que Cardoso desplegó el pasado sábado frente al Sevilla en Balaídos debido a la sanción de Okay Yokuslu, quien vio la quinta tarjeta amarilla del curso frente a los de Pablo Machín y tendrá que cumplir mañana el correspondiente encuentro de suspensión.

La ausencia del eficiente centrocampista turco, autor del gol de la victoria frente a los nervionenses, se compensa en cierto modo con el regreso de Wesley Hoedt, sancionado en el último encuentro por su expulsión con doble amarilla en el Nuevo José Zorrilla. El central holandés se disputará presumiblemente con David Costas un puesto para acompañar a Néstor Araújo en el eje de la zaga. El canterano fue titular con Cardoso hasta su lesión en vísperas del compromiso liguero frente al Athletic Club y regresó al verde en el último encuentro contra el Sevilla como suplente de Gustavo Cabral, pero con una semana más de rodaje parece ya en perfectas condiciones de pelear la titularidad con el central holandés.

Hoedt, si finalmente si impone a Costas, podría no ser la única novedad en defensa, donde Cardoso podrá contar ya con el lateral zurdo uruguayo Lucas Olaza, incorporado en el último día del mercado de enero junto al atacante franco-argelino Ryad Boudebouz, quien ya fue convocado por el técnico ante el Sevilla y que inicialmente apunta de nuevo al banquillo.

La ausencia de Okay propiciará necesariamente cambios en la línea medular, donde la novedad en el once podría ser Stanislav Lobotka. El eslovaco podría acompañar en un triple pivote a Jozabed y Fran Beltrán, si finalmente Aspas inicia el encuentro desde el banquillo, o disputarse una plaza con ambos en caso de que, como se espera, el moañés conforme junto a Maxi Gómez la punta de ataque.