Miguel Cardoso no está preocupado por su futuro, incluso si una quinta derrota consecutiva este mediodía en el Nuevo José Zorrilla relega al Celta a puestos de descenso. "No tengo tiempo de pensar si mi cargo está en peligro. Hay una enorme ilusión en el grupo y si el entrenador no tiene la capacidad de trabajar como el primer día no va a sumar, sino a restar cosas al equipo", declaró ayer en rueda de prensa el preparador luso antes de emprender viaje a Valladolid.
"Mi trabajo consiste en dar a mis jugadores la seguridad de que son capaces de competir al más alto nivel y motivarlos para hacer esto. Ésa es mi tarea", precisó el técnico céltico, que apostilló: "Por respeto a mis jugadores no me preocupa nada mi situación".
Miguel Cardoso eludió considera el duelo ante los blanquivioletas como el partido más importante de los que ha disputado con el Celta hasta la fecha. "Es el más importante porque es el próximo. El pasado fin de semana era también el más importante. Tiene mucha importancia porque hay que quebrar esa racha negativa y volver a las sensaciones que teníamos de que éramos muy competentes. Yo creo que lo seguimos siendo, pero hay que demostrarlo", apuntó.
El entrenador del Celta está convencido de que su equipo ha merecido sumar en la mayor parte de los encuentros disputados el mes de enero y espera poner fin a la crisis de resultados que acompaña al equipo desde mediados de diciembre con un triunfo en Pucela.
"El mes de enero nos ha hecho mucho daño. Creo que en Barcelona hicimos un partido muy interesante, pero no es esa derrota la que nos penaliza, sino las tres siguientes. Hay que romper esa racha", subrayó Cardoso, que espera que su equipo evite este mediodía contra los blanquivioletas los errores que le han impedido sumar un solo punto en los últimos cuatro partidos. "No podemos entregar partidos que teníamos en las manos, como los dos últimos, que hemos perdido o el del Athletic, que perdimos de forma increíble porque no fuimos peores que ellos. No se puede perder cuando eres mejor que el otro. Eso es malo", advirtió.
El entrenador del Celta se refirió a la baja de Iago Aspas, que retrasa su reaparición tras sufrir molestias el pasado miércoles en su regreso al trabajo con el grupo. "Claro que me preocupa [su ausencia], pero no puedo pensar en los que no tengo y creo que los que están listos para jugar están perfectamente capacitados para ganar en Valladolid", manifestó.
