El ayuntamiento de Vigo, propietario del estado municipal de Balaídos, inició este miércoles los trabajos de reparación de las gradas de Marcador y Gol para que ambas puedan ser utilizadas por los aficionados del Celta de Vigo en el partido del próximo lunes 7 contra el Athletic Club.

La entidad celeste envió el pasado 31 de diciembre un burofax al alcalde de la ciudad, Abel Caballero, en el que le comunica que no abrirá dichas gradas si no recibe "por escrito" un informe que certifique que son "aptas para su ocupación". En esa misiva, firmada por el presidente y máximo accionista Carlos Mouriño, el Celta adelanta que, en caso de verse obligado a cerrar dichas gradas, compensará a sus socios afectados, y posteriormente reclamará "todos los gastos y perjuicios" al ayuntamiento de Vigo.

"Sentimos tomar esta medida que va a perjudicar tremendamente al RC Celta, pero preferimos correr ese riesgo para evitar cualquier posibilidad de accidente", escribe Mouriño, quien pregunta al regidor socialista por qué no les da la "autorización por escrito" y entrega los "certificados" de seguridad.

Seguridad garantizada

El gobierno municipal de Vigo ha remitido al Real Club Celta el último informe técnico sobre el estado de las gradas de Gol y Marcador, en el estadio municipal de Balaídos, un documento que data de diciembre, y que confirma que no hay riesgo de colapso de la estructura y, por tanto, avala la seguridad de esas instalaciones.

En una comunicación firmada por el concejal de Fomento, Javier Pardo, el Ayuntamiento olívico ha trasladado a la entidad celeste que la administración municipal "nunca dejó de supervisar" el mantenimiento de las gradas y cubiertas del estadio. A ese respecto, el gobierno local incide en que "se vienen realizando históricamente estudios y análisis de las gradas del estadio por diferentes empresas", y todas ellas "concluyen que no existe agotamiento estructural en las gradas".

Además, según han confirmado fuentes municipales, el Ayuntamiento ha remitido al club el último informe técnico, que firma la empresa Capitel, al tiempo que han trasladado a la entidad celeste que se continuará con la obra de remodelación de Balaídos.

En el informe técnico, la empresa ha concluido que, tras inspeccionar las zonas de acceso público, no detecta síntomas o evidencias de agotamiento de la estructura que puedan "comprometer su uso". No obstante, recomienda la realización de reparaciones en determinadas zonas (juntas de dilatación y zonas de oxidaciones puntuales), como continuación de las obras de mantenimiento y los arreglos que se han venido realizando con anterioridad.