La llegada a Vigo de Miguel Cardoso ha favorecido a jugadores como Néstor Araújo, que había perdido la confianza de Antonio Mohamed en las últimas jornadas. El argentino prefería a Roncaglia, era su máxima referencia en el Celta: jugaba siempre y en cualquier posición. El entrenador portugués, en cambio, se decanta por centrales con mejor salida de balón y en ese aspecto, Araújo gana con claridad a Roncaglia, que en Villarreal no estaba entre los convocados. El zaguero mexicano, sin embargo, suma tres partidos completos de Liga con Cardoso, a quien le ha respondido a esta confianza con buenas actuaciones en el eje de la defensa, como la que protagonizó el sábado en el Estadio de la Cerámica. Araújo forma pareja de centrales con David Costas. Con ellos, el Celta logró dejar su portería a cero ante el Huesca y se mantuvo infranqueable durante 80 minutos en Villarreal. El equipo celeste entró en estado de pánico ante un fallo de Rubén Blanco que supuso el primer gol rival.