Las peñas del Celta, el Deportivo, el Lugo y el Compostela leyeron ayer un comunicado conjunto en la Plaza del Obradoiro, en la capital gallega, contra el partido que LaLiga pretende celebrar el próximo mes de enero en Miami (EE UU).

Las agrupaciones de aficionados de los cuatro clubes gallegos manifestaron "su rechazo" a que se disputen partidos de cualquier categoría, "ya sea el Girona-Barcelona o cualquier otro, fuera de España".

Los seguidores explican que en "ningún momento se les ha consultado, por parte de ningún estamento" sobre esa medida para poder "expresar su opinión al respeto", que habría sido, dicen, "un no rotundo ante la enésima pretensión de grandeza y con trasfondo meramente económico" de un modelo de fútbol que no les "representa".

Además, sostienen que disputar el partido en Miami "supone un perjuicio irreparable para el abonado, y el aficionado en general, que lo que quiere es ver a su equipo" en su estadio.

"No hay dinero ni compensación pecuniaria de tipo alguno que pague el sentimiento que genera, en el aficionado que entiende que el fútbol es más que un negocio, ver a su equipo rodeado de su gente, en su asiento, en un ambiente y un marco irremplazables", advierten las peñas.

Se preguntan los aficionados gallegos si "alguien se imagina un derbi gallego en Miami, Los Ángeles, Dubái", y responden con un rotundo no.

También defienden que "llevarse un partido de la competición doméstica fuera, a un campo neutral, supone un adulteramiento de la misma" y entienden que "proponer, siquiera" que uno de los partidos tenga lugar en "campo neutral es cambiar las reglas del juego de manera torticera.

Indican, igualmente, que "en el momento que uno de esos partidos se llegue a celebrar" fuera de España "se sentará un precedente que hará un daño irreparable" al fútbol y el aficionado, "sobre todo al del llamado club pequeño".

Los aficionados solicitan a sus clubes que "rechacen de manera pública la celebración" de cualquier partido de LaLiga fuera de España y animan al resto de federaciones, peñas y público a que se manifiesten en contra de lo que, consideran, "causará un daño irreversible" al fútbol y sus seguidores. La Federación Española también se opone al partrido en Miami.