Su calidad futbolística está a la altura de su indisciplina. El jugador al que la afición chilena bautizó como el Poeta por el gol que supuso un histórico triunfo ante la selección argentina vuelve a Vigo, donde encontró el hábitat perfecto para mostrar todo su arte con el balón en los pies. Camino de los 33 años de edad, Fabián Ariel Orellana Valenzuela (San Joaquín, Chile, 1986) ha protagonizado un largo recorrido deportivo, con paradas en Italia (Udinese) y en España (Xerez, Granada, Celta, Valencia y Eibar). El viernes se cumplen siete años de su debut con la camiseta celeste, frente al Girona. Cedido por el Granada, Orellana contribuyó al ascenso de los célticos a Primera División. El 31 de enero de 2013 volvió a Vigo para quedarse. Cuatro años completó en Balaídos antes de que Eduardo Berizzo exigiese su baja al club "por una falta de respeto inaceptable" hacia el técnico, como reconoció públicamente el preparador argentino. Orellana se marchó al Valencia, donde fracasó, y después el Eibar le dio otra oportunidad. El sábado volverá a Vigo con el equipo vasco. Será la primera visita del chileno a Balaídos desde aquel incidente con Berizzo que le impidió completar la temporada en la que el Celta disputó las semifinales de la UEFA Europa League y de la Copa del Rey. El equipo se resintió de tan importante baja en los momentos más importantes de un curso inolvidable.
Veintiún meses después de aquella amarga despedida, este poeta errante del fútbol vuelve a reencontrarse con el celtismo, además de enfrentarse a amigos como Iago Aspas. Orellana se perdió la anterior visita del Eibar a Vigo porque en la jornada anterior de LaLiga sufrió otro apagón de cordura y en ocho minutos le mostraron dos cartulinas amarillas que le supusieron la expulsión y el posterior partido de sanción. En enero de este año dejaba Mestalla por decisión de Marcelino García Toral y recalaba en Ipurua. Mendilibar esperaba recuperar a un futbolista con un gran talento que semanas antes de abandonar Vigo dejó importantes goles ante el Real Madrid, el Ajax, el Panathinaikos y el Deportivo.
Cuando Aspas regresó a Vigo, tras su paso por el Liverpool y el Sevilla, Orellana completó con Nolito y el moañés una de las mejores tripletas de ataque de LaLiga. Sin embargo, el carácter esquivo del chileno le acabó pasando factura en un vestuario donde coincidió con varios suramericanos.
Con su marcha al Valencia, el Celta ingresó 3 millones de euros. En Mestalla apenas contó con oportunidades y Marcelino lo apartó a pesar de convertirse en el máximo goleador del equipo durante la pretemporada de 2017.
El Eibar gestionó primero una cesión, supeditada a una futura compra por 2 millones de euros si conservaba la plaza en Primera División. En Ipurua, Orellana se ha reencontrado con dos excélticos, Yoel Rodríguez y Charles Dias. El guardameta vigués ha sido cedido al Valladolid después de ampliar contrato con el equipo armero hasta junio de 2021. El delantero hispano brasileño llegó a Eibar procedente del Málaga. Charles viene de anotar el tanto del empate ante el Athletic Club de Bilbao. Ya suma tres goles en LaLiga.
Orellana solo ha aportado una asistencia en los siete partidos que ha disputado este curso con el conjunto eibarrés. El sábado se reencontrará con la afición del Celta y con muchos excompañeros. El poeta errante del fútbol vuelve a Vigo. Es una seria amenaza para poner fin a la etapa de Mohamed como entrenador del Celta.
