A Antonio Mohamed le espera un duro ejercicio cada semana para elaborar la convocatoria de los jugadores que contará en los partido. La plantilla se amplió más de lo esperado y deseado por el técnico argentino al no encontrar acomodo el club a no menos de tres descartes. Veinticuatro jugadores figuran con ficha del primer equipo. A ellos se suma últimamente Dennis Eckert, del filial, con lo que el número de descartes se eleva a siete. En los desplazamientos, Mohamed quiere llevarse siempre a uno más (19), "por si pasa algo. Tenemos uno de protección". De esta forma, hoy serán seis los que se queden en Vigo, pues el hispano-alemán también viaja a Girona. En esa lista de descartes son fijos Radoja, Mazan y Jozabed. Mohamed no cuenta con ellos, pero apunta: "Tienen un número en su camiseta y son parte del plantel. Trabajan como todos y un día, si se necesitan y los tengo que utilizar, los utilizaré. Están un poco relegados. En su posición hay otros futbolistas. No hay ninguna orden del club de no poner a Radoja. Lo que pasa es que el plantel se armó pensando en que él iba a salir. Entonces, hay otros jugadores que están considerados por encima de él. En mi cabeza sé quién está primero, segundo y tercero en las decisiones, pero todos tienen la mismas posibilidades de jugar, todos".

"Hoy no tengo ese foco de conflicto", explica sobre el exceso de jugadores, "pero el día que aparezca lo voy a desactivar enseguida, con comunicación, con palabras, con hechos", sostiene el preparador argentino, que resalta la actitud de Emre Mor, a pesar de quedar relegado a la suplencia.

"Mor está trabajando mucho mejor y eso nos pone contentos. Ojalá que siga por ese camino. La esencia del deportista es competir y si juega otro tiene que competir para sacarle el puesto. Tanto Mor como Boufal lo están haciendo muy bien. También Hjulsager lo está haciendo muy bien. Tenemos alternativas", añade Mohamed, que dice "vivir en el día a día".