"Soy de los que dicen que el fútbol se tiene que jugar donde es, sobre todo por la gente que quiere disfrutar en su estadio y ver a su equipo. Con todo esto de las modernidades se hacen cosas extrañas, pero yo prefiero jugar en Balaídos que en Miami", dijo ayer Sergio Álvarez, portero del Celta, sobre el proyecto de LaLiga de llevar partidos a EE UU y la primera propuesta es un Girona-Barcelona.

El Girona será el próximo rival del Celta. "Es un equipo que mantiene muchos jugadores del pasado curso, cuando ya demostraron un nivel alto. Cambiaron de entrenador y no empezaron del todo bien, pero el otro día consiguieron un gran resultado en un campo muy difícil como es el del Villarreal. Vamos a tener que estar muy atentos a los pequeños detalles", señaló Sergio Álvarez.