Antonio Mohamed se mostró contundente el pasado sábado tras el primer amistoso de la pretemporada contra el modesto Córdoba: "Tenemos que empezar a ordenar el equipo de atrás para adelante porque arriba tenemos mucho talento para desequilibrar los partidos. Nuestro primer objetivo tiene que ser armar una estructura defensiva que nos dé solidez". La recomposición de la defensa es, por tanto, la principal preocupación del preparador céltico, que se propone emplear los próximos entrenamientos para avanzar en este terreno.

Dos de los defensas con mayor jerarquía del plantel, el argentino Gustavo Cabral y el internacional mexicano Néstor Araújo, el último de los refuerzos en incorporarse a la retaguardia, dan algunas pistas sobre cómo se propone el técnico mejorar el deficiente rendimiento defensivo del equipo.

"El equipo ha cambiado estos últimos años su forma de defender. Con Berizzo teníamos un modo de defender y con Unzué otro totalmente distinto, donde la defensa estaba más replegada, más junta y robábamos el balón por estar posicionados más que por provocar el error del rival", explica Cabral, que precisa: "Creo que con Mohamed va a cambiar en el sentido de que nosotros vamos a intentar provocar el error del rival apretándole arriba. Y a la hora de replegar es obvio que tenemos que tener un orden y tenemos que tener siempre un relevo. Yo, como central, sé que si salgo mi otro central o mi lateral tienen que cerrarme".

El zaguero argentino elogia la metodología del Turco, pero sobre todo la intensidad que está imprimiendo a la puesta a punto del equipo. "Está siendo duro, pero bonito. A mí me gusta este tipo de pretemporada. Los métodos han cambiado en Argentina y es muy parecido a lo que estamos haciendo este verano: ser intensos, tener potencia, trabajar en arena. Estamos trabajando muy bien y, por suerte, casi no hay lesionados", apunta. Y añade: "La intensidad es lo que mejor define lo que está siendo esta pretemporada".

Aunque hasta esta temporada no lo había dirigido, el mexicano Néstor Araújo conoce bien el estilo de juego y la forma de trabajar el nuevo entrenador del Celta. "La pretemporada está siendo muy dura. Es parecida a las pretemporadas que se hacen en México, seguramente porque el entrenador ha estado mucho tiempo allí. Conozco un poco su estilo de juego en los tres equipos que ha tenido en México y ha sido muy parecido. Y bueno, ahora hay que plasmar lo que él quiere del equipo en la cancha", expone el defensor azteca.

Araújo elogia también su estilo futbolístico. "Él quiere que el equipo sea intenso. Cuando no se tiene el balón, recuperarlo rápido, y que seamos muy ofensivos y alegres con la pelota. Todos los equipos donde él estuvo en México metieron muchos goles. Seguramente que también veremos un Celta alegre y ofensivo", señala.

Tal estilo de juego requiere una intensa ocupación del espacio y eficiente dominio del repliegue, dos de los aspectos del juego defensivo que Mohamed ha priorizado mejorar. "Somos conscientes de que también tendremos que replegarnos bien. Precisamente estamos trabajando estas cosas: el no dejar espacios y el tratar de recuperar el balón rápido para evitar jugadas que nos puedan dañar al contragolpe. Hay mucho tiempo todavía por delante, pero creo que vamos a buen paso y el trabajo físico ha sido muy bueno", observa Araújo.

La mayor competencia que se espera este curso precisamente con la llegada de Araújo y alguna otra incorporación que podría producirse es otro aspecto que, según Gustavo Cabral, debería mejorar el rendimiento defensivo del equipo.

"El fútbol es así. Yo lucharé por mi puesto como la hará Néstor [Araújo] y como lo harán Roncaglia o Fontás, Hugo, en fin, la mayoría de los que estamos acá para tratar de jugar. Es una competencia sana y me gusta que sea sana, que nos llevemos bien entre todos y al que le toque jugar que lo haga de la mejor manera", indica el zaguero porteño.