Balaídos cambia de nombre. El estadio vigués pasará a denominarse a partir de la próxima temporada estadio Abanca Balaídos, merced al acuerdo de colaboración suscrito entre el Celta y la entidad crediticia gallega. El presidente Carlos Mouriño y el consejero delegado de Abanca, Francisco Botas, presentaron ayer en la sede de Príncipe el nuevo convenio, que tendrá una vigencia de diez años y que se produce solo tres días después de la renovación del acuerdo de patrocinio por tres años con Estrella Galicia.

Aunque no ha trascendido la cifra que Abanca pagará al Celta por dar su nombre al estadio, se trata de una cantidad muy importante, que va a impulsar al club tanto en el aspecto económico como en el deportivo, según expresó Carlos Mouriño. "Contribuirá a hacer un Celta más grande y más fuerte", sentenció el presidente céltico.

Además de ampliar a una década la vigencia del acuerdo y renombrar el estadio, la marca Abanca lucirá en la parte trasera de las camisetas, en la ropa de paseo y entrenamiento, en el estadio, los campos de entrenamiento, el autobús y todo tipo de soportes publicitarios. Se refuerza además la colaboración institucional entre el club y la entidad financiera con actos promocionales con jugadores del primer equipo.

Carlos Mouriño destacó la importancia de que el Celta vaya "de la mano" con las empresas más importantes de Galicia. "Se han unido tres de las empresas más exitosas de Galicia para hacer un Celta más grande y fuerte, un Celta mejor en beneficio de Vigo y toda Galicia", señaló el dirigente celeste, que recordó la estrecha colaboración que el club mantuvo en su momento con Caixanova, la predecesora de Abanca, y su decisiva colaboración para la supervivencia del Celta durante el proceso concursal vivido hace unos años por el club. "Ahora, con Abanca, hemos firmado un convenio muy importante porque es a diez años, nos hace económicamente más fuertes y da una nueva prestancia al estadio", subrayó.

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La titularidad municipal del estadio no supone, según Mouriño, un inconveniente para el cambio de nombre de Balaídos, a pesar del conflicto abierto entre el Celta y el Consistorio por la construcción de la ciudad deportiva de Mos. El dirigente céltico explicó que el Concello está al corriente de las negociaciones que el club mantiene desde hace meses con Abanca y recordó que, en virtud del convenio firmado con el ayuntamiento, corresponde al Celta la explotación de la publicidad del estadio. "No creo que la Alcaldía ponga inconveniente alguno a que el Celta se refuerce económicamente para hacer un equipo mejor y darle más nombre fuera de Vigo", declaró.

Francisco Botas, mientras tanto, destacó la importancia de un acuerdo "muy relevante" que convierte al Celta en main partner (socio principal) por un periodo de diez años y que "profundiza en el patrocinio, en la visibilidad y en el compromiso" entre ambas instituciones. El cambio del nombre comercial de Balaídos es el punto "más visible" del convenio que Botas calificó como "un paso fundamental de nuestra estrategia de posicionamiento a largo plazo con un compañero de viaje óptimo que, más que un club, es una empresa que permea en la sociedad y que aporta riqueza y bienestar a su entorno".

"Pensamos que con este acuerdo estamos alineados con lo que piensan miles y miles de aficionados en Vigo y en toda Galicia", dijo. Y añadió: "Creemos firmemente en los valores deportivos para nuestra entidad y que desde ahí se extiendan a toda la sociedad en que vivimos", añadió el directivo.