Municipal de Marbella. Domingo. La mañana se ha consumido igual que el partido. Más de 120 minutos de agonía entre tiempo reglamentario, prórrogas y prolongaciones. La tanda de penaltis decidirá quién accede a la segunda ronda del play off de ascenso a Segunda. El Celta B tira primero; anotan Hernández, Molina, Pastrana, Álex y Agus. Se les van intercalando los locales, con igual éxito: Indiano, Ferrón, Bernal y Alonso. Luis Rioja tirará el quinto. Dani Sotres se aprieta los guantes.

El filial se había guarecido en el 2-0 de Barreiro. Ferrón iguala con un doblete relampagueante, en los minutos 51 y 54. Los celestes se sobreponen al colapso. "Tuvimos el partido controlado hasta que nos metieron el primer gol. Nos hizo daño. Por eso vino el segundo. Nos desestabilizó un poco", admite Sotres. Advierte: "Después fuimos capaces de mantener la calma y la compostura".

La tanda de penaltis despierta recuerdos amargos en Sotres. El cántabro jugaba la pasada temporada en el filial del Levante. La permanencia se dirimió en un play out con el Sanse. Ni un solo gol en los dos partidos. Los penaltis condenaron a los valencianos a Tercera.

Sotres ha de cargar con tal cicatriz durante esos segundos que parecen eones. Las estrellas nacen y mueren mientras Rioja acomoda el balón a once metros. Sotres repasa mentalmente sus notas. Esa semana, como siempre, ha estudiado en A Madroa junto al entrenador de porteros las características y manías de los principales lanzadores del Marbella. Luis Rioja no figura entre ellos. Se enfrenta a lo desconocido. La intuición debe reemplazar a la lógica. Rioja dispara a la derecha del portero, a media altura. Y descubre horrorizado que es justo donde Sotres lo espera: "Ha sido el momento más importante de mi carrera".

Cuatro días después aún es capaz de describir "la euforia, el subidón de adrenalina". Pero como un relato ajeno: "Ya ha pasado. Hemos tenido descanso, hemos vuelto a los entrenamientos y tenemos la mente puesta en el Cartagena".

El cuadro murciano es el nuevo adversario en el largo camino hacia Segunda. La ida, este domingo (12.00), en Barreiro. Los cartageneros llegan desde las antípodas emocionales: primeros del grupo IV, en la ronda de campeones se les escapó el ascenso por culpa de un gol en propia meta de Hugo Rodríguez en el descuento. "A pesar de haberse llevado un mazazo, son un equipo histórico, con una gran plantilla. Hacen muchas cosas bien. No será fácil", valora Sotres.

El entrenador del Cartagena, Alberto Monteagudo, no rechaza el papel de favorito. "El objetivo es ganar el partido y así encauzar la eliminatoria", ha declarado. A Sotres no le disgusta: "Seguramente vengan a por el partido y a marcar en Barreiro. No sé si será mejor o peor. Tenemos que centrarnos en nuestro juego, en lo que sabemos hacer bien".