La hora H y el día D para Iago Aspas es inminente. A la una del mediodía de este lunes el seleccionador nacional Julen Lopetegui dará a conocer la lista definitiva de España para el Mundial de Rusia. Veintitrés elegidos entre los que todo el celtismo anhela ver a su estrella. Las cartas ya están echadas. El delantero moañés ha hablado tanto dentro como fuera del campo. Veintitrés goles en una temporada para enmarcar en el plano individual en la que ha reiterado una y otra vez que jugar la Copa del Mundo es un "sueño" para él. ¿Será suficiente para Lopetegui? La decisión final del entrenador que cerrará el debate del 'nueve' de la Roja está a la vuelta de la esquina e Iago Aspas es el que más motivos ha acumulado para asegurar su presencia en Rusia.

1 - Registros de otra época

Iago Aspas ha sido capaz de brillar con luz propia en una temporada gris para el Celta. Sus registros con la camiseta celeste en esta campaña que ayer llegó a su fin con la goleada frente al Levante son de otro siglo. Nadie había marcado tantos goles en Primera desde hace 62 años. Los veintidós goles en Liga (a los que habría que añadirle uno en la Copa del Rey) aúpan al moañés al primer puesto de la tabla de goleadores célticos. Empata en lo alto de la clasificación con Mauro, que anotó los mismos tantos en 1956, y adelanta a ilustres como Hermidita o Pahíño. A sus 22 dianas hay que sumarle las 5 asistencias que ha repartido a sus compañeros.

2- El mejor frente a la competencia

Son muchos los delanteros que aspiran a un puesto en la convocatoria de Lopetegui pero solo hay hueco, presumiblemente, para tres. Todas las quinielas se centran en cuatro nombres: Diego Costa, Iago Aspas, Rodrigo Moreno y Álvaro Morata. El más destacado de toda esta nómina de atacantes ha sido Iago Aspas. También ha sido el más constante. El de Moaña ha ganado su segundo trofeo Zarra consecutivo, lo que le acredita como el mejor artillero nacional de los últimos años. Sus cifras superan a las de todos sus rivales. El que ha seguido su estela de cerca es Rodrigo. El futbolista del Valencia termina la campaña con 19 goles (16 en Liga y 3 en Copa). Diego Costa solo ha disputado 22 encuentros en todo este curso. Desde su llegada en enero al Atlético de Madrid ha anotado 7 goles (3 en Liga, 2 en Copa y otros 2 en Europa League). Álvaro Morata ha ido de más a menos esta campaña con el Chelsea. Empezó como titular pero tras su lesión perdió protagonismo en favor de Olivier Giroud. Ayer, en la final de la FA Cup, solo jugó tres minutos. Este curso ha marcado 15 tantos (11 en la Premier, 1 en Champions, 2 en la FA Cup y 1 en la Copa de la Liga), de los cuales solo 3 han sido en 2018.

Azul oscuro: goles en liga 2017-2018 de los delanteros españoles | Azul celeste: goles en otras competiciones.

3- Un valor seguro con España

Desde que Iago Aspas debutó con la selección española en noviembre de 2016 no ha dejado de producir. Según los datos estadísticos de @AfoutezaRCCelta, el canterano del Celta ha disputado un total de 277 minutos en ocho partidos con la Roja y ha participado en 9 goles, de los cuales 4 los ha marcado él y 5 llegaron después de una asistencia suya. Su efectividad con la camiseta del combinado nacional está al alcance de muy pocos. Los tres máximos goleadores históricos de España necesitaron más partidos que el moañés para llegar a esos números. Villa no marcó 4 goles hasta su noveno partido, Raúl González empleó diecisiete encuentros y Fernando Torres tardó veintitrés.

4- Un fijo para Lopetegui

La llamada a la selección le llegó a Iago Aspas por sorpresa. Julen Lopetegui le convocó de improviso en noviembre de 2016 por culpa de una lesión de Diego Costa. "Me estaba duchando cuando me avisó el utillero", confesó el jugador del Celta en aquella fecha. Sin embargo, aunque Aspas aterrizase en la selección para suplir la ausencia de un compañero supo caer con el pie derecho. Hizo su debut con la Roja en Wembley durante un amistoso frente a Inglaterra. Salió al campo con el equipo perdiendo, marcó un auténtico golazo y contribuyó en la consecución del empate. Desde entonces es un fijo en las concentraciones de España en las Rozas, ha entrado en sintonía con los pesos pesados del vestuario y ha conseguido el reconocimiento prácticamente unánime de la prensa nacional.

5- El fútbol de salón en su ADN

La presencia de Aspas en Rusia también debe entenderse como una cuestión de estilo. Su manera de jugar y de comprender lo que pasa dentro del campo se adapta a la perfección a la selección española. Del fútbol de salón. Iago Aspas es algo más que un simple delantero de área porque no solo marca goles. El de Moaña genera espacios para sus compañeros, crea juego, asiste y aparece por todo el frente de ataque. La mejor versión de la historia de España contó con David Villa de todos los que Lopetegui tiene a su disposición.

6- Un 'nueve' para cuatro posiciones

Ser un jugador polivalente es un valor seguro en el fútbol actual. Iago Aspas no puede encasillarse como el clásico delantero centro. El atacante celeste puede desempeñarse en cualquier posición del eje ofensivo. Delantero de referencia, falso nueve, segundo punta por detrás de un ariete, extremo... Las variantes que ofrece a Lopetegui son otro punto a su favor.

7- Compromiso con la Roja

El delantero de Moaña nunca ha dado por sentada su presencia en la lista definitiva de la Copa del Mundo. Aspas ha apretado más y más el acelerador, pero siempre desde la humildad y con el objetivo de cumplir uno de sus sueños de la infancia: disputar un Mundial. En diferentes entrevistas hasta ha bromeado con la posibilidad de ir a Rusia hasta de masajista. Lo cierto es que el jugador del Celta ha asegurado que él quiere sumar. Ser un jugador de equipo. Ha declarado que le gustaría ser titular pero que también está contento con el rol de revulsivo que podría otorgarle el entrenador nacional.

8- Siempre aparece en las grandes citas

Iago Aspas es un jugador de carácter, un ganador de pura cepa que no entiende de partidos intrascendentes. Da lo mejor de sí mismo ante el líder y ante el colista, en Balaídos o en Old Trafford, otra razón para contar con él en el Mundial. El de Moaña va a jugar sin complejos en cualquier escenario porque es el Messi de la clase obrera. Su competitividad es contagiosa y no es negociable: "No por jugar al lado de Silva o Iniesta, dos de los mejores jugadores de la historia de España, me voy a acojonar", comentó esta semana en Fiebre Maldini.

9- Un jugador que no tiene techo

El próximo 1 de agosto, dos semanas después de que se haya disputado la final del Mundial, Iago Aspas cumplirá 31 años. Superada la treintena, el moañés se encuentra en el mejor momento de su carrera. Desde su debut en 2009 en Segunda División con aquel doblete histórico contra el Alavés el celeste no ha dejado de crecer. El ascenso a Primera, la consolidación en la élite, el salto internacional, el regreso a casa, las semifinales de Copa del Rey y Europa League, la convocatoria con la selección... El siguiente paso debe ser el Mundial. Después todo son incógnitas. Aspas no ha cerrado la puerta a marcharse y en sus últimas declaraciones se mostró enigmático: "Nunca sabes lo que va a pasar, pero estoy contento en casa, con la familia y los amigos". En las pasadas semanas se relacionó al goleador del Celta con el Atlético de Madrid, uno de los clubes que podría estar dispuesto a desmbolsar los 40 millones de euros de la cláusula de rescisión del internacional céltico, pues Carlos Mouriño y la dirección deportiva viguesa no negociarán su salida por menos dinero.

Iago Aspas, felicitado por Pepe Reina. // J.C. Hidalgo