Una inoportuna lesión durante el calentamiento de Rubén Blanco, previa al partido que el Celta disputó en Balaídos contra el Málaga, obligó al cuerpo técnico a convocar de urgencia a Fran Barbosa Vieites, portero del equipo de categoría juvenil. El guardameta, que se sentó en el banquillo del municipal vigués ya con el partido empezado, había estado horas antes en el banco de Barreiro como arquero suplente en el encuentro que disputó el Celta B ante el Racing de Ferrol.

Una carambola ha permitido al juvenil sentarse en el banquillo del primer equipo. El Celta decidió en el mes de enero ceder a su tercer portero, Iván Villar, al Levante, donde tampoco está teniendo minutos. La dirección deportiva decidió afrontar la segunda mitad de temporada solo con Sergio Álvarez, hoy titular bajo los palos contra el Málaga, y Rubén Blanco. Cuando nuevamente se lesionó el portero de Mos en el tendón de Aquiles durante el calentamiento, el Celta necesitaba a otro portero para sentarse en el banquillo, por eso tiró del filial. Sin embargo, el Celta B había terminado de jugar hace unos minutos el partido que empezó a las 16.00 horas en Barreiro ante el Racing de Ferrol. Sotres no era seleccionable porque acababa de jugar y Gero, el otro guardameta del filial, está lesionado. Por ese motivo en el banquillo del Celta B estaba Fran Barbosa, un futbolista juvenil.