El Celta dio un paso atrás en sus aspiraciones de pelear por una de las dos primeras plazas del grupo. Los vigueses esperan con incertidumbre el partido en la cumbre que esta mañana disputan en Abegondo el Deportivo B y el Sporting de Gijón, primer y segundo clasificado respectivamente.

El partido de ayer en Oviedo no pudo comenzar para los vigueses, que a los dos minutos se adelantaban en el marcador por mediación de Álvarez. Un tanto que le dio a los vigueses la tranquilidad necesaria para afrontar el resto del encuentro con la tranquilidad que daba verse por delante en el marcador.

Como era de esperar, el cuadro asturiano dio un paso al frente para buscar el empate, y es que ocupar una cómoda posición en la clasificación, sin presión, le permite afrontar los encuentros de otra forma muy diferente.

Pero a pesar de este dominio asturiano, el Celta se encontraba cómodo sobre el terreno de juego moviendo bien el balón y sin pasar apuros. Pero no todo fue fácil, sobre todo al comienzo de la segunda parte, cuando los asturianos salieron con fuerza y a los cinco minutos lograron el tanto que suponía la igualada.

El Celta trató por todos los medios de llevarse la victoria, pero no fueron capaces de aprovechar las ocasiones que generaron.