Llevan el celtismo en las venas y en el corazón. Son gente de sangre celeste, que comparte penas y alegrías. Se organizan para ir a Balaídos o a cualquier otro estadio donde juegue su equipo y para seguirlo por televisión cuando no pueden viajar. También promueven comidas o cenas, como la que mañana reunirá a ochenta "comanditos" en un restaurante vigués. Esta vez, la excusa es que Comando Celta cumple 30 años de vida al lado de un equipo con el que lloraron por el asesinato de Quinocho, con el que se hundieron anímicamente por los descensos o las derrotas en las finales de Copa, con el que se inquietaron por la crisis de los avales o con el que disfrutaron por los ascensos y los triunfos ante los más grandes de la Liga y de Europa.
Este Comando Celta lo idearon a finales de 1986 media docena de aficionados durante un viaje a Riazor y se formalizaba como peña del Celta en marzo de 1987. Su primera ubicación en Balaídos fue en la grada de Preferencia (ahora Tribuna Baja). Después vendría su paso por Río Bajo, para instalarse definitivamente en Marcador, en la esquina próxima a Tribuna.
Durante ese largo recorrido por más de la mitad del perímetro del estadio vigués, los "Comando" han hecho familiar su bandera con el vikingo del casco con cuernos y el nombre de la ciudad en fondo rojo, las bufandas con el lema "Ante todo, mucha caña" (inspirándose en el título de un disco de Siniestro Total) o su himno. En su libro de incidencias y anécdotas también aparecen sus paseos por los alrededores de Balaídos en un autobús descapotable, la denuncia contra Scaloni por insultar a Vigo desde el balcón del Ayuntamiento de A Coruña o el rapto que sufrieron de una de sus pancartas por parte de los seguidores del Ajax, que ahora la exhiben en el Johan Cruyff Arena (antiguo Amsterdam Arena) como si fuese un trofeo de guerra.
Para celebrar el décimo aniversario, Comando Celta publicó un libro, que se transformó en vídeo para el vigésimo. "Ahora vamos a hacer réplicas de la primera bufanda de la peña, que regalaremos con un pin a los que asistan a la cena del sábado", desvela Franchu, presidente y único superviviente del grupo fundacional de la peña más veterana del Celta, a la que Alejandra, una de las peñistas, augura una larga vida: "Otros 30 años más y los que queden por delante. El relevo generacional está asegurado. Tenemos un nuevo comandito desde hace un mes y los hay de cuatro o cinco años".
"El secreto de cumplir 30 años es el trabajo de la directiva y de los peñistas. Hacerte socio de una peña siempre te ayuda porque es la que se encarga de gestionar las entradas, desplazamientos, comidas...", explica Ana Ferreiro, la tesorera de Comando Celta.
Alrededor de 170 personas conforman esta agrupación de celtistas. "Es un número manejable. Tienes que abarcar lo que puedes", subraya la tesorera. Luis es socios desde hace una década: "Creo que el fútbol se disfruta más en una peña. Entré porque en aquella época se llevaban muchos los foros en Internet y los conocí por DelCelta.com".
La herramienta aliada para la intendencia de Comando Celta es Whatsapp, "por el que todos estamos al día sobre la peña", apunta María. "Tenemos un peñista, Pepe, de 81 años, que participa en todo: partidos, viajes, fiestas, comidas, bailes. Incluso vino a animarnos hoy [por ayer] al torneo de la Federación de Peñas".
Ante un Balaídos en reconstrucción, Comando proclama que continuará en su ubicación actual en Marcador, donde coincide con peñas como Carcamáns, Centolos Celestes, Churrascos, Peña Iago Aspas... "Hay de todo. Lo que esperamos las peñas es que en el menor tiempo posible hagan una grada acorde a la afición que tiene el Celta, que nos acerquen a la línea de fondo del campo, porque ahora estamos a mucha distancia. Todas las peñas podemos hacer un fondo que sea el terror de todos los rivales", propone Malvido.
"Lo de la peña vale tanto para las alegrías como para las penas. La peña es tu otra familia, la familia celeste, la familia Comando. Es lo más grande que tiene la peña", sostiene Malvido, uno de los veteranos y de los más viajeros para acompañar al Celta.
La peña dispone de un local en los bajos de Balaídos, en la zona de Marcador. "Tenemos tertulias todas las semanas. No solo es venir al campo u obtener una entrada para un viaje. Aquí se hace vida como en familia, pues siempre estamos en contacto, más allá del fútbol. Hay una cosa que te une y eso hace que seamos una gran familia. El último viaje más importante lo hicimos a Manchester, pero hay dos [Malvido y Jonatham] que se patean todos los campos", indica Alejandra.
Cuatrocientas pesetas pagaban de cuota mensual los socios de Comando Celta cuando el grupo se puso en marcha por primera vez para viajar a Sestao con su equipo del alma. Ahora desembolsan 25 euros al año. Entre medias, los "Comando" vivieron cuatro ascensos a Primera y tres descensos a Segunda, además de disfrutar de los brillantes años del EuroCelta. Tres décadas de vida para una peña que quiere ser eterna, como su sentimiento celeste.
"En los campos, cada vez somos menos aficionados"
- Los precios y los horarios del fútbol están apartando a los aficionados de los estadios, lo que algunos denominan como "odio al fútbol moderno". Todo esto se debate y preocupa a los socios de Comando Celta. "En los campos, cada vez somos menos aficionados. Ahora está montado para ver el fútbol por televisión. Las facilidades que se le dan a la gente son nulas. En Balaídos, por ejemplo, hay muchos menos aficionados ahora que hace quince años", señala Malvido, uno de los veteranos de Comando Celta: "Interesa más que el partido se vea en China que atender al aficionado de aquí". Jonathan, otro socio de la más veterana agrupación de celtistas, también se decanta por compartir las emociones del fútbol, pero reconoce que los elevados precios de los abonos "no te lo ponen muy fácil porque los están subiendo cada año". Ángel Prado, que ejerce como secretario de Comando Celta, apostilla: "Ahora no podemos decir que el club nos trate demasiado bien". En la cena de aniversario de la peña, prevista para mañana en el Restaurante Don Pepe, a partir de las 21 horas, se espera que el Celta envíe a un par de representantes de su junta directiva. Tambiénse cuenta con la presencia del alcalde Abel Caballero y de alguno de sus concejales, además de antiguos jugadores como Gudelj, Ratkovic, Maté, Salva, Alvelo o Pichi Lucas. Un trío musical amenizará esta velada festiva.
