La Liga española se queda atrás. Esta semana se ha vuelto a poner de manifiesto. El VAR, el sistema de vídeo que ayuda al árbitro a resolver jugadas dudosas, no se implanta en España por las diferencieas entre Liga, Federación de Fútbol y por lo que supone de pérdida de poder para estamentos antes sagrados. En Europa apenas quedan grandes campeonatos sin utilizarlo. El español es uno de ellos.

Tras la primera jornada el VAR ha estado en boca de todo el mundo. Han sido varios los entrenadores que a la finalización de los partidos han reclamado su implantación. Fran Escribá o Quique Flores lo han hecho y seguramente la próxima semana serán otros los que insistan en su utilización.

Esta jornada el VAR hubiera podido cambiar o decidir el destino de cinco partidos de la Liga española. Uno de ellos el del Celta, que perdió ante la Real Sociedad 2-3 por una jugada que Mateu Lahoz convirtió en penalti a favor de los vascos cuando la entrada de Jonny se había producido fuera del área. Así llegó el tercer gol de los realistas que culminó la remontada.

Los 4 partidos de Liga que hubiesen cambiado con el VAR

Pero no solo en Balaídos se vio la importancia que hubiera tenido la utilización del vídeo como asistente del colegiado. En San Mamés, en el Athletic-Getafe el árbitro Mario Melero no dio por válido un gol de Markel Bergara para el cuadro madrileño, pese a que Kepa sacó el balón tras traspasar claramente la línea de gol.

Sigamos con el festival. En el primer partido del campeonato (el Leganés-Alavés) el gol de la vitoria del Leganés llegó precedido de un fuera de juego de Gabriel, por lo que debió ser anulado por Munuera Montero y no subir al marcador.

Otro partido que dejó dudas fue el Sevilla-Espanyol a cuenta del gol que dio el triunfo a los sevillanos que Hernández Hernández dio por válido y que hasta el lunes (el partido se jugó el sábado) no se pudo comprobar si realmente había atravesado la línea de gol remate de Lenglet o no.

La última incidencia se produjo en el Levante-Villarreal del lunes, que se inclinó a favor de los valencianos gracias a un penalti inexistente materializado por Morales a dos minutos del final del partido. La repetición evidenciaba que Rukavina toca balón cuando se cruza con el rival, pero Álvarez Izquierdo cayó en la trampa.

Y eso sin contar acciones como aquella en la que Sergio Ramos se salvó de la expulsión tras dar un manotazo a Schär en la cara.