Empieza el peregrinaje de los abonados de Río por culpa de las obras que se viven en la grada y que se prolongarán durante los próximos meses.

El Celta anunció ayer que debido a las obras de remodelación del estadio la grada de Río permanecerá cerrada el próximo miércoles en el encuentro que el equipo disputará ante el Udinese y correspondente al Memorial Quinocho, por lo que los abonados de Río Alto y Río Bajo que quieran asistir al mismo deberán retirar en las taquillas de Balaídos una invitación para acceder a las gradas que estén disponibles.

Las entradas e invitaciones para el XXII Trofeo Memorial Quinocho estarán disponibles en taquillas el lunes y martes de 10 a 14 y de 17 a 20 horas y el miércoles, día del partido, desde las 10 hasta el pitido inicial, en horario ininterrumpido. Se supone que esa misma solución sería la que utilizarían en el encuentro del domingo 13 de agosto y que les enfrentará a la Roma. Aunque existe un exceso de mutismo en relación a todo lo que tiene que ver con las obras en el estadio, se espera que los abonados puedan acceder a la grada de Río en el primer partido liguero contra la Real Sociedad. A dos semanas de ese momento, nadie ha comunicado a los abonados que no vaya a ser así.

El Celta informó que las entradas para el partido que el equipo dirigido por Juan Carlos Unzué disputará el próximo miércoles contra el Udinese italiano oscilarán entre los 15 euros que vale un asiento en Marcador o Gol y los 25 en Tribuna.

Este encuentro será el primero que juegue el conjunto celeste ante su afición, pues hasta ahora ha disputado un triangular en Ferrol (contra el Racing y el Sporting), dos amistosos en Inglaterra (Brentford y Burnley) y el de esta tarde en el campo del Bayer Leverkusen.