El Celta cierra su gira de pretemporada con un empate (3-3) en el BayArena frente al Bayer Leverkusen, octavofinalista de la pasada edición de la Champions. El equipo vigués exhibió una pegada mortífera que le sirvió para contrarrestar el dominio de los germanos. Sergio Álvarez, que celebraba sus treinta años, fue el baluarte que necesitó el conjunto celeste para mantener su portería a cero hasta el descanso. Los alemanes tuvieron desde el principio las ideas más claras pero sin embargo fue Guidetti, a los seis minutos, quien convirtió un mal control en un golazo desde la frontal. A partir de ahí los hombres dirigidos por Juan Carlos Unzué desaparecieron. El Leverkusen no tuvo problemas para imponerse a la medular formada por Radoja, Brais Méndez y Daniel Wass y asediar la portería de Sergio. Solo la inspiración del de Catoira y la falta de puntería evitaron que el Celta se marchase goleado al vestuario.

En la segunda mitad los vigueses mejoraron. Iago Aspas e Iván Villar sustituyeron de entrada a Hjulsager y a Sergio y el Celta dio un paso delante de la mano de una coordinada presión adelantada. El trabajo tuvo su fruto al cuarto de hora de la reanudación. Tras una disputa en el centro del campo, Beauvue asistió a Guidetti para que el sueco no perdonase en el mano a mano ante Leno con un toque cruzado con el exterior.

Pero el Bayer Leverkusen se repuso muy pronto del golpe y le dio la vuelta al marcador de un plumazo. Todas las ocasiones que no definieron los germanos en el primer tiempo las materializaron en diez minutos. Primero el internacional suizo Mehmedi con un derechazo desde el interior del área, luego Pohjanpalo después de una asistencia de Bellarabi y finalmente Volland, con un zambombazo que sorprendió a Iván Villar.

Unzué completó su carrusel de sustituciones y sobre el césped se quedó un equipo completamente diferente al que había iniciado el encuentro. Los celestes volvieron a aplicarse en la presión y mostraron, otra vez, su versión más afilada. A falta de siete minutos Maxi Gómez le ganó la espalda a los centrales alemanes y remató al fondo de la red un centro de Sisto. El primer gol del uruguayo con la camiseta del Celta. Aún tendría el danés una última oportunidad para adelantar a los suyos, pero decidió jugarse un difícil remate cruzado en vez de habilitar a Aspas o a Hugo Mallo, en mejor posición.

El Celta cierra la gira con un balance de dos empates (Burnley y Leverkusen) y una derrota (Brentford). El equipo vigués regresará a Vigo para culminar el tramo final de la pretemporada y jugar otros dos amistosos en Balaídos -ante el Udinese y la Roma- antes de que empiece la Liga el próximo 19 de agosto ante la Real Sociedad.