La llegada de Juan Carlos Unzué al banquillo del Celta puede dar un giro de 180 grados a la situación de Andrew Hjulsager, que cuenta con muchas opciones de ocupar una de 20 plazas disponibles en la plantilla para los jugadores de campo después de haber tenido escaso protagonismo el pasado curso con Eduardo Berizzo.

El prometedor final de temporada firmado por el jugador escandinavo, adornado con un golazo a la Real Sociedad en el último partido de Liga, pero sobre todo su gran rendimiento con la selección danesa en el Campeonato de Europa sub 21 han convencido a la dirección deportiva celeste de que Hjulsager puede ser un futbolista importante en el proyecto deportivo que va a liderar el técnico navarro. Unzué también ha seguido al jugador durante su participación en el Europeo y cuenta con el jugador para el próximo curso, a la espera de una evaluación más detallada durante la pretemporada.

En Plaza de España tienen incluso el convencimiento de que Hjulsager tuvo el pasado curso con Berizzo menos protagonismo del que merecía. A la hora de valorar su continuidad, tanto el club como el técnico han tenido en cuenta las características del jugador, que puede ocupar varias posiciones de ataque aunque se mueve preferentemente por la banda derecha, y la falta de jugadores de su mismo perfil en esta demarcación. Unzué carece, de hecho, de jugadores específicos para la banda derecha, donde el Celta ha utilizado la pasada temporada a Claudio Beauvue y Iago Aspas, dos delanteros reconvertidos y, muy ocasionalmente, al principio de curso, a Pione Sisto, compatriota y compañero de selección de Hjulsager.

Andrew Hjulsager, de 22 años, llegó al Celta en el último día del mercado de invierno procedente del Brondby, el equipo en el que también se formaron Michael Krohn-Dehli y Daniel Wass, que recibió algo más de un millón de euros por su traspaso. La precipitada marcha de Fabián Orellana al Valencia por un conflicto disciplinario con Berizzo, el retraso en la recuperación de Beauvue y el buen precio de la operación -Hjulsager concluía contrato y se negaba a renovar con el Brondby- aceleraron su fichaje, anunciado casi sobre el cierre del mercado.

"Pensamos que necesitábamos más un jugador de banda que en algún momento nos pueda ayudar por dentro, pero sobre todo que nos pueda ayudar por fuera. Con la llegada de Jozabed creíamos que la banda derecha es la posición donde estamos más desprotegidos", explicó el director deportivo del Celta, Felipe Miñambres, en la presentación del jugador.

La falta de adaptación a la Liga suponía sin embargo un problema de rendimiento inmediato. Hjulsager necesitaba tiempo para acomodarse al fútbol español y debía asimilar también el peculiar estilo de juego de Berizzo, muy distinto al que estaba acostumbrado en el Brondby. Esta circunstancia y las buenas prestaciones ofrecidas por Beauvue casi un año después de romperse el tendón de Aquiles acabaron restándole minutos. Con el Celta disputó apenas 259, repartidos en siete partidos de Liga, aunque solo tres de ellos como titular. Hjulsager no pudo jugar en competición continental al haber disputado con el Brondby la fase de clasificación para la Europa League aunque sí tuvo un amplio protagonismo en la Liga danesa, donde fue titular indiscutible con su equipo, antes de fichar por el Celta.

A la conclusión de la Liga, antes de iniciar con la sub 21 el Europeo de Polonia, Hjulsager recibió la llamada de la selección absoluta de Dinamarca. El seleccionador danés, Age Hareide, aprovechó la lesión de Henrik Dalsgaard para convocar al atacante celeste para un partido amistoso ante Alemania, finalmente sin minutos. Hjulsager se reincorporó luego a la sub 21 para disputar el Europeo de la categoría, donde brilló más que su selección, eliminada tras un discreto papel.