Al Celta le sobran los últimos quince minutos en Madrid

Tal y como se esperaba, el Atlético de Madrid salió en tromba buscando el tanto que igualara la eliminatoria. El Celta aguantaba el empuje colchonero como podía, pero el equipo no era el que una semana antes había jugado en el campo de O Vao. Si hace siete días, Salomon Obama era una isla pegada a la banda izquierda del ataque del Atlético de Madrid, ayer fue una pesadilla para el cuadro vigues.

A los diez minutos el interior hacía el tanto que igualaba la eliminatoria, y al Celta le seguía costando sacarse la presión de encima. El Atlético seguía fuerte, y a la media hora de juego conseguía darle la vuelta al marcador con un segundo tanto de Salomon Obama. Fue un tanto que marcó un punto de inflexión en el encuentro, pues el cuadro vigués consiguió reaccionar. El equipo entrenado por David de Dios dio un paso al frente y los jugadores célticos comenzaron a llegar a la frontal del área defendida por Conde.

Poco antes de llegarse al tiempo de descanso, el Celta marcaba un gol, que fue anulado por el colegiado del encuentro. Los célticos se dieron cuenta de que podían marcar, y dispusieron de varias opciones con disparos que salieron fuera por poco.

El paso por el vestuario no cambió demasiado el guión del encuentro. El Celta seguía jugando mejor que el Atlético de Madrid, y volvía a tener ocasiones para lograr un gol que los metiera en semifinales. Este llegó en el minuto sesenta y ocho por mediación de Alberto, y en ese momento el Celta estaba en semifinales.

Poco más de veinte minutos para el final en donde se pedía máxima concentración, pero que falló en el minuto setenta y cinco, al no saber defender una jugada a balón parado, habitual en el sistema de juego del cuadro colchonero.

A partir de ese momento paso al frente a la desesperada, que aprovecharon los colchoneros para sentenciar la eliminatoria.