El Celta regresó esta mañana a los entrenamientos en A Madroa con todos sus efectivos, a excepción del lesionado de larga duración Giuseppe Rossi. En la suave sesión de trabajo de los que ayer perdieron en Vitoria también participó Marcelo Díaz, recuperado del golpe que recibió en la cabeza y que le obligó a abandonar el partido antes del descanso. Nemanja Radoja se marchó al vestuario antes de tiempo debido a unos problemas físicos que no le impedirán jugar contra el máximo candidato al título de Liga.

Sobre la mala imagen que el equipo de Berizzo volvió a dejar en la Liga, donde acumula cinco derrotas seguidas, habló Sergi Gómez, que se mostró crítico con la actuación de ayer ante el Alavés y confía que el equipo mejore y deje buenas sensaciones en los dos partidos que le restan para concluir la temporada.

"Empezamos con mal pie el partido, no salieron bien las cosas. El resultado fue muy abultado en la primera parte. En el descanso intentamos analizar lo que nos pasaba, estaba claro que no estábamos en nuestro mejor momento. Tuvimos que cambiar alguna cosa y pienso que al final el juego mejoró, pero aún así el resultado del principio era muy abultado y fue imposible poder ganar", señaló el zaguero catalán en la sala de prensa de A Madroa.

Sergi Gómez asume responsabilidades tras otra mala imagen del Celta en la Liga, después de brillar el jueves pasado en Old Trafford: "Hay muchos factores que te pueden servir como excusa, pero sabemos que también era un partido importante, como los dos que quedan, y lo importante era conseguir los tres puntos. No lo logramos porque el inicio del partido no fue nada bueno y eso nos condicionó mucho".

Espera el defensa del Celta que el equipo ofrezca una mejor imagen en los dos partidos que le restan para el adiós al curso: ante el Real Madrid y la Real Sociedad, ambos en Balaídos: "Siempre queremos dejar una buena imagen del club y sobre todo por lo que venimos haciendo durante toda la temporada. Pienso que a nadie le gusta la imagen que dejamos en Vitoria. Quedan dos partidos para regalarle a nuestra afición la imagen que realmente somos y la que hemos mostrado durante todo el año".

Apunta que uno de los problemas del Celta en estos partidos de Liga es la falta de tensión o motivación. "Cuando hay factores que se juntan de manera negativa pues el equipo no responde. Ayer fue una muestra de que igual no estábamos tensionados, que ellos lo estaban más que nosotros y eso hace que en el minuto 15 ya vayas perdiendo 2-0. Está claro que no ha sido nuestro mejor partido, ni colectivo ni individual. Hay que intentar corregir eso y saber que no nos ayudó".

Apunta que analizaron lo sucedido, incluida la autocrítica: "Hemos decidido que no se puede dar esta imagen. Sabemos que quedan dos partidos muy importantes en casa y que hay que ir a por todas porque nos jugamos mucho de cara a nuestra gente, con el apoyo que nos han ofrecido durante todo el año. Pienso que es importante hacer dos buenos partidos".

Cree que la acumulación de compromisos por mantenerse vivos hasta el final en las tres competiciones les ha pasado factura. "Está claro que cuando luchas por tres competiciones es una temporada muy ilusionante. Sí es cierto que hasta el final hemos estado al límite, jugando prácticamente por todos los objetivos, pero es cierto que no lo hemos conseguido, que nos hemos quedado en la orilla. Pero esto nos tiene que servir de motivación para estos dos partidos en casa con nuestra gente y terminar bien un año que a pesar de que no hemos conseguido ningún título pienso que hemos competido muy bien y que hemos dejado el listón muy alto".

Recuerda el central céltico que el club vivió situaciones peores en otros momentos en los que también compitió en Europa: "Somos conscientes de que también otros años se ha descendido cuando hemos disputado otras competiciones, pero ahora todo pasa por dos partidos muy importantes que nos van a servir para dejar una buena sensación al club y a toda la afición".

Las cinco derrotas consecutivas en Liga han llevado al Celta hasta la décimo tercera plaza, cuando hace apenas un mes luchaba por alcanzar la séptima: "Los números hablan por sí solos. Está claro que las últimas derrotas no han ayudado nada. Sí es cierto que hemos priorizado, por ejemplo, competir contra el Manchester United y contra otros rivales de Europa League, y se ha priorizado esa competición antes que la Liga, pero los números hablan por sí solos. Pero pienso que tiene mucho mérito lo que hicimos en Copa y en Europa League".

Tampoco se muestra contento Sergi Gómez por su rendimiento durante este curso, en el que se convirtió en la cuarta opción para Berizzo como defensa central: "No ha sido mi mejor año, sabiendo que no he tenido los minutos esperados y deseados. Cuando no estás teniendo continuidad no es fácil dar tu mejor versión. A nivel colectivo pienso que hemos dado la cara hasta el final. Sí es cierto que los últimos resultados que obtuvimos en la Liga no están ayudando a que esa sea la sensación, pero pienso que lo que lo que viene será mejor y hay que prepararse para lo que venga".

Y se muestra optimista el futbolista catalán ante la visita del Real Madrid (Balaídos, 21 horas): "El miércoles tenemos otra oportunidad de disfrutar de nuestro fútbol, de nuestra gente, de nuestro estadio. Pienso que puede ser una gran oportunidad para disfrutar y para celebrarlo todos juntos". Y apunta que no piensa en poder ayudar a su exequipo, el Barcelona. "No. Pienso en nuestro equipo, en la importancia de ganar al Madrid y en un final de temporada con una victoria en casa ante el Madrid, jugándose lo que se juega. Pienso que no hay nada mejor para el aficionado del Celta que ver a su equipo disputándole la victoria al Madrid y ganarle".