El talonario suele ayudar pero no lo es todo en el fútbol. El azar y no el dinero impidió anotar al Celta en Old Trafford en esa última jugada del partido que, de haber acabado con el balón en el fondo de la portería de Romero, habría dado con en la cuneta con los huesos del poderoso Manchester United. La eliminatoria entre los celestes y los Diablos Rojos se alejó más que nunca de la lógica económica que acostumbra imperar en las grandes ligas. El multimillonario equipo de José Mourinho no está en la final por sus inagotables recursos económicos, sino porque Beauvue decidió centrar en lugar de buscar puerta y a Guidetti se le quedó el balón atrás. Tan sencillo como eso.

El United fue superior al Celta en Balaídos y el grupo de Berizzo enmudeció el Teatro de los Sueños obligando al su poderoso rival a cavar una trinchera en torno a su portería. Después de 180 igualados minutos, la eliminatoria se decidió en un instante con estadísticas en el partido de vuelta sumamente favorables para el conjunto vigués, que superó a su poderoso adversario en cuestiones tan significativas como la posesión del balón (61 por 39 por ciento), los disparos a portería (17 por 10) y los pases completados (593 por 281), cifras del todo inusuales para un equipo, como el de José Mourinho, que solo ha perdido ocho partidos en toda la temporada.

Los número reflejan bien a las claras superioridad del cuadro de Eduardo Berizzo en el segundo asalto de la semifinal, pero no sorprenden tanto como la comparativa de lo que pagaron ambos clubes por los futbolistas que conformaron su formación inicial, que ambos técnicos utilizaron por cierto en los dos encuentros del cruce.

La cifra pagada en traspasos por el Manchester United por el once que se enfrentó al Celta asciende a 307 millones de euros, lo que supone casi cuatro veces el presupuesto del club vigués para la temporada en curso (77 millones), que es también el mayor de su historia.

Pero los números contrastan aún más si se compara con el dinero pagado por el Celta por el once que saltó el pasado jueves al césped de Old Trafford. El montante desembolsado por el equipo de Balaídos fue de 16,8 millones, menos de lo que el Manchester pagó por cualquiera de los futbolistas de su once, exceptuando Romero, que llegó libre, y los canteranos Rashford y Lingard, incorporados del filial a coste cero.

El Celta suma seis futbolistas sin coste a su formación, los de los canteranos Sergio Álvarez, Hugo Mallo y Jonny Otto, y los de los defensas Facundo Roncaglia y Gustavo Cabral y el delantero John Guidetti, que llegaron al club con la carta de libertad. El fichaje más caro incorporado por el Celta ha sido el del danés Pione Sisto (6 millones), seguido de los 5,3 desembolsados por Iago Aspas. Calderilla comparado con los de Pogba (105 millones), Baily (38) o Mkhitaryan (42), por citar los tres principales fichajes que el Manchester United incorporó a sus filas el pasado verano.

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