Laponia: frío, hielo, nieve, cielos estrellados, noches maravillosas, sueños, ilusiones, renos...; pero no, no es tal el lugar, ni más ni menos, que este nuestro ínclito alcalde (colocado en tal cargo por su antes sempiterno enemigo, Baltar, ahora su mejor y admirado aliado...) nos ha regalado nada más y nada menos que unos renos tirando por un remolque. Seis renos, para mayor gloria para este nuestro excelentísimo alcalde, una folclórica idea más para esta maltratada ciudad llamada Ourense. No acabo de creerlo, no puedo asumirlo, veo vídeos y más vídeos, que se hacen virales... (los renos, no solo el belén lamentable, cutre, paupérrimo, rocambolesco, irrisorio, ridículo, absurdo, etc...; y podíamos seguir y seguir, por este mismo alcalde colocado, y sigo sin creérmelo, pero al final, tras cientos de vídeos, no queda otra que admitirlo, el ínclito alcalde ha pagado, ¿cuánto?, por traernos unos renos.

Me pregunto, dónde están las asociaciones protectoras de animales, para evitar, haber impedido y denunciar este hecho tan lamentable, así como que algunos vecinos y ciudadanos de este Concello acudan a contemplar tan patético y lamentable espectáculo.

Hace años, y no muchos por desgracia, se consiguió terminar con espectáculos tales como unos maltratados ponis, dando vueltas y más vueltas, girando horas tras horas en una atracción, soportando el peso de niños y adolescentes cuyos progenitores sin escrúpulos ahí los colocaban, con cámara en mano eso sí, para inmortalizar tal vergüenza.

Ahora nos encontramos con unos animales, unos renos, arrastrando un remolque a modo de carroza, para vanagloria de un personaje, que con unos escasos meses detentando el poder municipal, da muestras de su ególatra personalidad, por no recordar aquí, ideas tales como rascacielos de 80 plantas, estaciones de AVE calificadas como alpendres y a posteriori como obras excepcionales, parques acuáticos con localizaciones a diario distintas, escaleras mecánicas irrealizables, etc.

Tristeza produce que tenga que acudir al maltrato animal, al absurdo de un remolque tirado por renos, para intentar ocultar sus nulas carencias como gestor (necesita de 27 asesores, nada más y nada menos, los máximos permitidos, pues si tal limitación no se hubiese establecido, con cuántos se rodearía? Prefiero no imaginármelo), su falta absoluta de educación y respeto al resto de personal del Concello, así como todo a funcionario por extensión, y todo aquel que ose simplemente discrepar de sus opiniones, de sus decisiones o sencillamente piense de forma distinta.

Sin mencionar sus réplicas en pleno, sus respuestas, sus argumentaciones, basadas en lenguaje "barriobajero", vulgar, ramplón, mediocre, grosero, agresivo, despreciativo, ofensivo, indolente, tosco, impropio e indigno de un cargo público, de un representante, recordar, de todos y cada uno de los ciudadanos de Ourense, lo hayan o no votado.

Me consuelo pensando que solo le quedan tres años y medio, aunque bien pensado, si en 6 meses ha llevado a cabo tales despropósitos, qué no hará, conseguirá, llevará a cabo el resto de mandato.

Solo reconocerle un mérito: que a nivel nacional, gracias a su belén, a sus renos, a sus rascacielos... (esto de momento solo en 6 meses), Ourense existe, Ourense aparece en el mapa y habrá que aplicar aquello de que "hablen de mí aunque sea mal"... que por cierto, a susodicho personaje, bien le ha ido, de momento ha conseguido su ansiado sueño de ser alcalde, el cómo, a cambio de qué? no importa? ¿Lo conoceremos algún día?