¿Qué ha cambiado en seis meses? Esa es la pregunta que ayer a mediodía se hacían cientos de miles de españoles. Lo que no fue posible en abril se ha resuelto en menos de cuarenta y ocho horas. Pedro Sánchez, maestro en el arte de la simulación, lo ha explicado sin pestañear. Él no quería a Unidas Podemos en el Gobierno pero las urnas se lo piden y él acata la decisión del pueblo. No importa si convocó elecciones para obtener una mayor representación o si en su beneficio conseguía forzar el aumento de apoyo a Vox para así reducir la diferencia con el PP. Lo único importante es que los españoles hemos ido a elecciones para que Pedro Sánchez pudiera gobernar.