¿Debería un deportista ser medianamente ecologista? A ver, los futbolistas juegan sobre hierba. Y sin agua no hay hierba. Y con el calentamiento climático cada vez hay menos agua. Y por lógica bebe antes la población que el césped. O no hay lógica, que puede ser el caso. También necesitan una atmósfera aceptable para correr por la banda. Deberían por ello utilizar vehículos eléctricos o de hidrógeno. Marcándose un tanto. O no. Pero el caso es que las grandes y pequeñas estrellas del balón se decantan por coches de alta gama, horteras y extremadamente contaminantes. Los presidentes también siguen la tendencia. Suelen todos ellos desmarcarse del transporte público. Una mediocridad.
El día que me encuentre un futbolista en el 'vitrasa' lo felicito. Lo felicito por tener la Vigopass. De vez en cuando aparece por el fútbol un jugador como Pione Sisto con un utilitario normal. Y entonces es noticia. El danés actúa al modo nórdico. Sin estridencias de colorines ni extravagancias innecesarias. Hay un 'gran danés' por cada pléyade de estrellas con deportivos descapotables. El ecosistema también existe amigos. Y la hierba artificial solo crece en el desierto.
