Durante todo el año podemos comprar y degustar los famosos "pimientos de Padrón". Pero, ojo, la mayoría de estos pimientos no proceden de Padrón o del valle del Salnés, pero sí de la comunidad valenciana, andaluza o Marruecos.

Los verdaderos pimientos de Padrón, que se cultivan es esa localidad y valle del Salnés, se pueden encontrar entre los meses de mayo y septiembre. Su sabor es exclusivo y muy diferente a los que provienen de otras comunidades.

Por la tierra y el microclima, los pimientos gallegos son de mejor calidad y tienen un mejor sabor que los caracteriza por sus sensaciones, desprendiendo unos aromas que recordaremos durante toda nuestra vida. Estos pimientos necesitan una tierra virgen y esta la encontramos en Galicia. La raza, la edad y situación de las parcelas determinan su exquisito sabor.

En el mes de abril y en Murcia, dos matrimonios italianos se alegraron al ver en la carta del restaurante los famosos pimientos. Los habían comido en su peregrinación a Santiago de Compostela. Les dije que aquellos pimientos llevaban el nombre de Padrón, pero que fueron cultivados en Marruecos y no en Galicia, además aquellos pimientos eran más grandes y su sabor no era el mismo.

Más tarde apareció el camarero con el plato de pimientos que habían pedido, a distancia daba envidia ver aquel plato. Los probaron y me dieron la razón, aquellos no tenían el sabor de los de Galicia.

Bueno ya lo saben, de abril hasta septiembre pueden ser de Galicia. El resto de los meses, aunque lleven el nombre de Padrón, ya no son cultivados en Galicia y servirán solamente para decorar los platos y satisfacer a los turistas.