La Policía Nacional abortó el pase de unos 150 kilos de cocaína en la madrileña estación de tren de Atocha en una operación en la que fueron detenidas cuatro personas integrantes de una organización de narcotraficantes, entre ellos su cabecilla, que se desplazó a España desde Colombia.

La cocaína fue transportada desde Huelva en vehículos con compartimentos preparados para ocultarla, y estaba previsto que el traspaso se realizara en el aparcamiento de la estación.

La organización introducía la droga en España desde Colombia a través de embarcaciones que hacían escala en Huelva y desde allí la trasladaban por carretera hasta Madrid.