Me levanto como cada día, sol radiante, salgo por la puerta de mi edificio, piso la calle, de momento todo normal? cuando, de pronto, un nuevo banco, nooo... Otro más, dos bancos más en un escaso trayecto. Me sorprendo, no doy crédito, si se ha convertido mi calle en el parque del Retiro, calculando el número de bancos en proporción a las medidas de dicha calle... No paro de darle vueltas sin encontrar una razón lógica a semejante despliegue por parte de nuestro excelentísimo alcalde, realizado en este mi barrio, mi calle? cuando, claro, una fecha, unas elecciones todo lo explica... el voto, tan codiciado, tan peleado por unos y por otros, pero por supuesto los que el poder ahora detentan, acuden a cualquier medio para conseguir el voto soñado... Un banco... nada más y nada menos, algo tan sencillo, tan impensable, haciendo sencillos cálculos, una media de 10 votos por banco, salen un total de 50 votos que sumados a los indirectos del boca a boca de los usuarios preceptivos de los mismos hacen un total de 100 votos, en una calle, mi calle. Sin duda una buena inversión, más si cabe, que no supone al bolsillo del partido, a la partida de "gastos de campaña", en cuestión ningún perjuicio, ya que dicha inversión sale del erario público, esto es, de todos y cada uno de los sufridos ciudadanos.

Como consuelo busco el argumento de que afortunadamente no se instalen ya las famosas casetas-carcasas de autobús con el logo ya vintage, tan pintoresco, de Excelentísima Diputación de Ourense (solo les faltó colocarles a las mismas una foto del insigne señor Baltar), pues, la verdad, no me imagino esta calle, mi calle, con 5 casetas mencionadas... aunque bien pensado, si así fuese, como punto turístico de interés? no tendría desperdicio... Noooo, mejor no dar ideas a este nuestro excelentísimo alcalde de los fulares, por muchos calificado como el mejor de la democracia? ironía supongo, quiero pensar.

En fin, sigo caminando y quiero pensar que este número de bancos en una calle, mi calle, no responde más que a una vaga visión errónea fruto de la edad que ya empieza a causar desajustes en la mirada... sí, será eso, olvidémonos de la mala fe y pensamientos retorcidos de unas elecciones próximas, a la vista, ya encima, aunque tanta obra -parche- chapuza últimamente!