Increíblemente este personaje recibe el apoyo disimulado o explícito de la mayor parte de la izquierda española, sobre, todo por Podemos, así como por sectores de la prensa española, e internacional, mucha de ella regada con incentivos económicos, procedentes de la maquinaria del "Procés", que sale de dinero público de nuestros impuestos. Acusan al Estado español de represor, intolerante y fascista, al tiempo que la "Generalidad" en Cataluña ha fomentado durante lustros la xenofobia y la persecución de los no nacionalistas, multando incluso a los que rotulen sus negocios en castellano y eliminando el español en la enseñanza, de manera que muchos sintiéndose incómodos están saliendo de Cataluña; limpieza étnica, para conseguir finalmente ser mayoría; fenómeno que se está contagiando además a Baleares y Valencia. Curiosamente ellos tan demócratas, tolerantes y libertarios, reciben el apoyo de partidos de ultraderecha xenófobos flamencos y neonazis alemanes o austriacos, a la vez que también del régimen totalitario revolucionario bolivariano de Maduro o de los etarras de Bildu-Batasuna. Un total desvarío y Carles con la sonrisa.