A finales del pasado mes de febrero, un centenar largo de vecinos de Baiona registró en el Concello de este municipio una propuesta para que el doctor Lorenzo Pousa, hasta entonces director del Centro de Salud, fuera nombrado Hijo Adoptivo de la capital miñorana. A esa petición se adhirió, un mes después, otro centenar de firmas y así quedó formalizado en la sede municipal, a escasos metros del despacho del alcalde.

En febrero, nada más tener conocimiento de la iniciativa, tanto el regidor como su antecesor y actual conselleiro de Sanidade, don Jesús Vázquez Almuiña, expresaron su entusiasta apoyo a ese homenaje al doctor Pousa Estévez, que ejerció durante 30 años en la villa y cuyas demandas lograron la creación del Centro de Salud de Baiona. No hay noticia de que tres meses después de aquella razonada propuesta el asunto haya sido tenido en consideración por la Comisión de Honores y Distinciones. Suponemos que tanto el debido respeto al doctor Pousa como la palabra de los señores Nodal y Almuiña, y la estima a los ciudadanos proponentes,merecerían saber a qué se debe la demora. Los concejales consultados, tanto del grupo de Gobierno como de la oposición, expresan su apoyo al nombramiento pero dicen que no les ha llegado el asunto. El tiempo apremia porque estas distinciones honoríficas suelen entregarse en las fiestas patronales de julio.