La Policía Nacional detuvo a cuatro personas que distribuían pornografía infantil a través de la aplicación Whatsapp. Los delincuentes, de Oviedo, Valencia, Murcia y Madrid, formaban parte de un grupo de esta aplicación de mensajería en el que participaban otras 52 personas de distintos países y en el que habían compartido un vídeo de una menor víctima de abusos sexuales.

En el registro de los domicilios de los detenidos fueron intervenidos también siete discos duros, tres memorias USB, una tarjeta de memoria, tres teléfonos móviles y 44 soportes ópticos con material pedófilo.

La detención ha sido el último episodio de una operación que comenzó hace dos años cuando la Policía recibió un aviso del organismo de EE UU encargado de recibir y canalizar perfiles de pornografía infantil que señalaba a varios usuarios españoles. Gracias a este aviso se detuvo primero a un hombre residente en Oviedo que, presuntamente, habría colgado en internet decenas de fotografías y vídeos pedófilos en distintas plataformas y que, según se comprobó en el registro de su domicilio, formaba parte de una red activa de distribución de este tipo de material a través de mensajería.